La salida en masa de miles de visitantes refuerza el temor de muchos habitantes de Sharm el Sheij a que los atentados acaben con el turismo, que es casi la única fuente de ingresos de la ciudad. Las cancelaciones y la marcha antes de tiempo de muchos viajeros son un hecho, pese a que los responsables de los hoteles tratan de minimizar su importancia.

Sólo el responsable de un hotel accedió a hablar del tema y bajo la condición de que no se diera su nombre ni el del establecimiento. "Hemos cancelado alrededor de un cuarto de las reservas. Y además, cerca del 20% de nuestros clientes se han marchado antes de tiempo, sobre todo los árabe-israelíes. Estamos ante un problema muy grave", comentó el gerente.

La mayoría de los centros de la ciudad presentan decenas de maletas en sus entradas, pertenecientes a los turistas que han decidido acortar sus vacaciones y que están a la espera de que su agente de viajes les confirme la fecha de la partida.

Sharm el Sheij es una ciudad turística. Los visitantes extranjeros generan, directa o indirectamente, un cuarto de millón de empleos, según la Asociación de Inversores de Sharm el Sheij.

Según la agencia oficial Mena, 6.548 turistas abandonaron la ciudad en las últimas 24 horas, un problema que tienen muy presente las agencias mayoristas.

Mahmud Ahmad, representante de una agencia de viajes que trabaja habitualmente con turistas españoles, explicó que de los 250 españoles que debían llegar la semana que viene a Sharm, "más de la mitad han cancelado sus reservas".