La Comisión Europea debe presentar a finales de mes sus propuestas en respuesta a las demandas de varios países como Francia y España para modificar el sistema de fijación de precios de la electricidad y hacerlos menos dependientes de la cotización del gas.

El ministro francés de Economía y Finanzas, Bruno Le Maire lo expuso así este martes en una entrevista al canal de televisión BFM Business, en la que insistió en que está justificada la petición de vincular los precios a los costos de generación de la electricidad en cada país.

A su juicio, lo que ha ocurrido con esos precios "confirma nuestras intuiciones" y las demandas que hicieron el pasado año a Bruselas, que inicialmente se opuso, aunque esa posición de rechazo ha evolucionado en las últimas semanas.

"No es proteccionismo, es sentido común", subrayó Le Maire, que dijo que no se trata de reservar la electricidad producida en Francia únicamente a los consumidores franceses, pero sí de que puedan beneficiarse de las decisiones e inversiones "estratégicas" del país para tener energía "descarbonizada", sobre todo la procedente de las centrales nucleares.

A ese mismo respecto, señaló que "es normal que los españoles, que hacen esfuerzos masivos en las renovables, tengan un retorno a su inversión".

Francia, España, Italia, Grecia y Rumanía han planteado que la regulación del mercado energético de la UE se adapte para proteger a los consumidores y reflejar "las ventajas de la transición energética", según dijo en diciembre la ministra española de la Transición Energética, Teresa Ribera.

Se trataría de que el precio final de la electricidad para los consumidores reflejara realmente los costes de generación, pero sin afectar al mecanismo de formación de precios de los mercados mayoristas.

Para el ministro francés, frente a la volatilidad de los mercados "spot", "hace falta estabilidad, hacen falta contratos a largo plazo".

Además, se quejó de que "el precio que paga el consumidor no se corresponde con los precios de costo en cada país" y consideró "una locura económica y una locura climática" que eso esté en función de la cotización del gas.