El ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, afirmó hoy sobre las pensiones de los diputados que no tiene que existir "ningún privilegio" en comparación con el resto de ciudadanos, pero consideró que el ejercicio de un cargo público tampoco puede conllevar "perjuicios" para quien lo hace.

En rueda de prensa para informar de la Conferencia Sectorial sobre Empleo de hoy, Gómez se refirió así la iniciativa que el PP quiere llevar al Congreso para que desaparezcan los "privilegios" en las pensiones de los parlamentarios.

Según el ministro de Trabajo, en el ámbito de las pensiones no tiene que haber ninguna "distancia" en la forma en que se protegen las de los diputados y las de los ciudadanos.

Para Gómez, no pueden darse privilegios porque todos los ciudadanos deben recibir el mismo trato. No obstante, precisó que hay que tener "buenos medios" para que los "mejores" puedan entrar y salir de la actividad pública sin que les suponga "perjuicios" el volver al mercado de trabajo.

Por su parte, el secretario de Organización del PSOE, Marcelino Iglesias, ha dicho hoy que los socialistas son partidarios de mantener el "statu quo" de los ex presidentes del Gobierno por respeto a lo que representa su figura y, por lo tanto, no están a favor de recortar sus pensiones vitalicias.

Con estas palabras se ha referido a la propuesta de ERC-IU-ICV, que quiere limitar por ley las actuales pensiones vitalicias de los ex presidentes del Gobierno -que se queden en un máximo de dos años- e incluso suprimirlas si en ese periodo de tiempo compaginan la indemnización pública son un sueldo.

Respecto a la iniciativa del presidente del PP, Mariano Rajoy, de eliminar los "privilegios" que puedan tener los parlamentarios, Iglesias ha reiterado la disposición del PSOE a hablar, porque no tiene una "postura bloqueada".