El UCAM Murcia ya ha puesto su primera piedra. Ha tardado más de lo habitual por los problemas que hay en la dirección deportiva con Pedro Reverte y Miguel Linares, pero ha terminado cayendo. Se trata de Rafael González, más conocido como Chuma, que viene para ser uno de los referentes en la parcela ofensiva. El delantero andaluz viene de completar una temporada excepcional en el San Roque de Lepe, en el que ha marcado 16 goles en 32 partidos en el Grupo IV de Segunda RFEF. Unas cifras que le han servido para ser el sexto máximo artillero de toda la categoría (contando los cinco grupos) y el segundo del Grupo IV, solo por detrás de Casas, del Córdoba, que metió 17 tantos.
Chuma ha sido una pieza indispensable para Antonio Fernández en el San roque de Lepe, siendo titular en 26 de los 32 partidos disputados y superando la barrera de los 2.000 minutos. Con tan solo 25 años, se postula como la máxima referencia del conjunto universitario para intentar retornar a la Primera RFEF.
El sevillano, empezó en las bases del Sevilla FC hasta jugar en la Youth League y en Tercera División con el Sevilla C. Además, también jugó un partido con la selección española sub-16.
En la 17-18, pasó por la Unión Balompédica Lebrijana, donde marcó 13 goles en 20 partidos, una gran marca para un futbolista de 19 años. Un año más tarde, jugó en el Córdoba B, una experiencia que le sirvió para debutar con el primer equipo en Segunda División, acumulando tres encuentros en la 18-19.
Antes de desembarcar en el San Roque de Lepe, pasó por el Atlético Levante y el Xerez CD, donde no mostró su mejor versión. Pero, en la última temporada, el delantero ha vuelto a demostrar que va sobrado de olfato goleador.
