Cada día son más mujeres preocupadas por su salud y su mejora física, y con esa finalidad en muchos casos, deciden calzarse unas zapatillas y comenzar en el mundo del “running”,

Si bien cualquier corredor independientemente de su sexo, debe considerar y respetar unas determinadas pautas para lograr el éxito (descanso, alimentación, rutinas variadas …), las mujeres, por sus condiciones concretas, deben tener en cuenta otra serie de aspectos que afectarán directamente tanto a su salud deportiva como al rendimiento que derivará de sus entrenos. De cara a preparar la Carrera de la Mujer 2022 que se disputa el próximo 6 de marzo en Murcia, algunos de los aspectos más importantes son los siguientes:

1. Entrenamiento de fuerza: de forma necesaria e indispensable, debe de incluirse en las rutinas planificadas semanalmente, especialmente importante cuanta más edad se tenga. Este trabajo no solo permitirá una mejor salud deportiva sino que aportará numerosos beneficios relacionados con el rendimiento deportivo.

Sustancialmente se deberá de prestar atención específica al trabajo del suelo pélvico, velando por evitar los problemas físicos que pueden derivar y afectar a la salud y con ello a la práctica deportiva.

2. Fases del ciclo menstrual: según la fase del ciclo, el cuerpo admitirá mejor unos estímulos de entreno u otros. La fase previa a la menstruación será el momento más adecuado para los entrenamientos de larga duración o intensidad. En cambio en la fase inicial del ciclo, se tiende a la deshidratación entre otros aspectos, y por tanto, será necesario adecuado reducir más las cargas de entrenamiento durante la misma.

3. Pérdida de densidad ósea: que afecta especialmente a las mujeres, sobre todo a partir de los 30 años. Correr ha demostrado que puede mejorar la densidad ósea. Se recomienda aumentar el consumo de alimentos ricos en vitamina D y en calcio.

4. Necesidad de controlar los valores de hemoglobina y hierro: La existencia de deficiencias puede suponer reducción niveles de fuerza y rendimiento deportivo. Recomendable realizar análisis periódicos, en mayor medida durante y tras el embarazo o si se tiene un peso muy bajo. Se debe de controlar especialmente durante el ciclo menstrual.

5. Necesidades durante el embarazo: correr durante el embarazo puede ser adecuado e incluso recomendable, especialmente si antes de estar embarazada se dedicaba tiempo a correr. Si bien, se hace necesario tener en cuenta las individualidades para cada deportista, sus condiciones personales y siempre con un control médico. En los entrenos se deben controlar las actividades de alta intensidad, evitar el ejercicio en ambientes calurosos o húmedos y no descuidar el entrenamiento de fuerza.

6. Problemas derivados del “exceso”: en mujeres fondistas, cuando se requiere un alto nivel de rendimiento y se reduce mucho el porcentaje graso, se puede llegar a padecer de amenorrea (pérdida del ciclo menstrual). Para prevenir se debe tener especial cuidado con la alimentación y el control de las cargas de entrenamiento.

Podemos concluir, que lo más importante como deportista en general y como corredora en particular, que la actividad deportiva se debe plantear con objetivos a medio y largo plazo, huyendo de los resultados inmediatos, las prisas y la precipitación.

Partir de una planificación adecuada y adaptada a tus necesidades y condiciones particulares. Y cuidar detalles como la alimentación, respetar los descansos y realizar controles médicos o fisioterapéuticos preventivos. Medidas que puedan afectar a la actividad y que en muchos casos son tan importantes como el entrenamiento diario.