El Real Murcia lleva unas temporadas en las que no solo compite en los terrenos de juego. Desde 2018, el club murcianista compagina sus partidos ligueros con su calendario judicial. Cada varios meses, la batalla por la propiedad obliga a los ahora responsables del club a verse las caras con Mauricio García de la Vega, quien lucha por recuperar su paquete accionarial tras ser expulsado de Nueva Condomina por Raúl Moro, Deseado Flores y Miguel Martínez.

Llevan unas semanas en los despachos murcianistas intentando asimilar la sentencia de la Audiencia Provincial que daba la razón al mexicano y que anulaba la ampliación de capital de 2018. En ese mismo tiempo han aprovechado para preparar el recurso al Supremo con el que confían en una remontada complicada, pero que por lo menos permitirá ganar tiempo a un consejo de administración que no tiene ninguna intención de irse. Pero no será ese el único frente abierto en estos próximos meses. Y es que ya asoma otra nueva batalla judicial.

Mauricio García de la Vega no solo acudió a los tribunales para anular la ampliación de capital aprobada por Gálvez e impulsada por la Parmu a finales de 2018. El mexicano también puso a trabajar a sus abogados cuando el Real Murcia, ya con Francisco Tornel como máximo accionista, aprobaba un nuevo periodo de venta de acciones en 2019. Pues esa segunda demanda hará que ambas partes vuelvan a verse las caras en los juzgados. Y ya hay fecha para esa cita. Será el miércoles 14 de julio cuando Antonio Rubio, abogado grana, represente al club en una audiencia previa que se llevará a cabo en el Juzgado de lo Mercantil número 2 de Murcia.

La cita provocará como un déjà vu, porque será prácticamente similar a la que tuvo lugar el 26 de febrero de 2019, cuando la jueza María Dolores de las Heras escuchó a las partes antes de fijar la fecha para el juicio definitivo, que fue el 5 de noviembre de 2019. A diferencia de aquel proceso, en esta ocasión, la reclamación de García de la Vega ha caído en otro juzgado. Será en el Mercantil número 2, por lo que el próximo 14 de julio no será De las Heras la que presida la sala. El magistrado que tendrá que decidir sobre este caso será Francisco Cano Marco, quien ya intervino cuando el mexicano acudió a la justicia para que frenase los créditos participativos que iba a lanzar Víctor Gálvez en verano de 2018, una idea que el oriolano finalmente no llevó a cabo.

Así, el 14 de julio comenzará el proceso para anular la ampliación de capital que arrancó el 27 de febrero de 2020. Los granas recaudaron 700.000 euros con la venta de acciones, cifra a la que hay que sumar los casi 800.000 que se ingresaron a finales de 2019 gracias a préstamos que luego fueron convertidos en títulos.

Con este aumento de capital, como ocurriera en 2018, el gran perjudicado fue Mauricio García de la Vega, que perdía su condición de accionista mayoritario, pasando de tener un 84% del capital social a no llegar al 8%. Además, en todos estos años el mexicano no ha logrado que el consejo de administración le registre en el Libro de Socios del club grana.

Con la anulación de la ampliación de capital de 2018 por parte de la Audiencia Provincial, que revocaba la sentencia del Juzgado de lo Mercantil número 1 de Murcia y daba la razón al mexicano en su pelea por recuperar la propiedad del Real Murcia, poco suspense tendrá el proceso que comenzará en julio, ya que lo normal es que el magistrado Cano Marco se ajuste a lo dicho en segunda instancia. La duda está en si en la misma cita previa dejará el proceso visto para sentencia, apoyándose en el efecto de cosa juzgada, o si fijará fecha para el juicio definitivo.