«Yo puse 200.000 euros y yo decido quién es consejero del Real Murcia y quién no». La frase, de Francisco Tornel, no fue pronunciada en la Junta de Accionista que ayer se celebró en Nueva Condomina de forma telemática. Pero la frase, que resonó con fuerza en la reunión de noviembre de 2019, sigue estando de plena actualidad.

No cuenta ya Francisco Tornel con 200.000 euros en el capital social del club grana. Desde hace unos meses, el notario murciano tiene unos cuantos euros más. Y si a esos euros más se le suman los que controla el KBusiness, o los que reúne Prevemur, o los que tiene en sus manos Enrique Roca, o los que el consejo de administración logra aglutinar en cada una de las Juntas, el resultado deja poco lugar a las sorpresas. Un holding es lo que ha formado el consejo, y se volvió a demostrar en la cita de ayer, donde el presidente y sus consejeros no solo ganaron por goleada sino que además confirmaron que la oposición, por mucho que pataleen, son tan pocos, que ni suman a la hora de la verdad.

Y es que, si el Real Murcia presume de tener 30.000 dueños, solo tiene que llegar una Junta de Accionistas para comprobar que a la mayoría de aficionados todo lo que no sea fútbol, todo lo que sean guerras de poder, no le interesa. Porque ayer, la oposición, liderada por Higinio Pérez y que cuenta con Txema Almela como la voz de cara a los medios y a los aficionados, llegó absolutamente sin nada. Porque la Asociación de Accionistas Minoritarios, que en anteriores juntas había hecho campaña para aglutinar acciones, en esta ocasión no movió un dedo. Porque la Federación de Peñas del Real Murcia está en tierra de nadie. Y sin nadie que movilice a los pequeños, a los que tienen unas pocas acciones para ayudar económicamente, no para liderar guerras por el poder, los debates quedan en simples pataletas, como la del ´modelo alemán' o la de las sillas del consejo de administración.

Porque los mismos que cuestionan las limitaciones en la entrada de un gran inversor, y que lograron que el consejo volviera a someter a votación los cambios en los estatutos introducidos el pasado mes de febrero, llegaron a la Junta sin inversor y sin respaldo socia en forma de delegación de votos. Los mismos que dicen hablar en nombre de los aficionados apenas fueron capaces de atraer a la cita a un par de decenas de accionistas. Porque a la Junta de ayer solo se inscribieron 150 accionistas de 30.000, y la mayoría habían sido reclutados por los integrantes del consejo.

Solo había que ver las cifras. Entre los 150 inscritos reunían 1,5 millones de euros, lo que deja claro que mientras que el consejo de administración hizo su trabajo, mostrando una vez más la fortaleza que les ha permitido gobernar con sus virtudes y sus defectos al Real Murcia; la oposición cumple a la perfección lo de mucho ruido y pocas nueces.

Y en esa falta de trabajo previo comenzó su contundente derrota. Porque las votaciones demostraron que no hay ningún debate sobre el modelo alemán. Porque mientras que los aficionados con acciones no comparecieron en la Junta, el consejo de administración llegó con toda la artillería, logrando que el 96% del capital social representado en la cita de ayer apoyase los estatutos que restringen que pueda llegar un inversor que adquiera más del 50% de las acciones.

No ocurrió solo una vez. Ocurrió en cada uno de los puntos del orden del día. Poco importó que a Txema Almela, Quique Baeza, Higinio Pérez, la Federación de Peñas... no les convenza el nombre de los elegidos para ocupar las nuevas sillas del consejo; de poco sirvieron las intervenciones cuestionando que los nuevos consejeros son de la misma cuerda de los actuales o diciendo que echan en falta a personas que representen a la afición.

Después de cinco horas, la cita telemática, que se hizo repetitiva durante muchos minutos, Francisco Tornel y sus consejeros ganaron por goleada. Es más, se les encontró menos nerviosos ante las preguntas que en citas anteriores. A los opositores, por su parte, solo les queda seguir pataleando en las redes sociales.

Prevemur, Tomi Maquinaria y Enrique Roca, en el consejo

El consejo de administración del Real Murcia tendrá a partir de ahora tres integrantes más. A Francisco Tornel, Francisco Cobacho, Francisco Miró, Daniel Moreno y Álvaro Ruiz se unirán tres representantes de las empresas que tienen más poder dentro del capital social. Así, Enrique Roca tendrá una silla, aunque no la ocupará personalmente, sino que ha elegido a Pérez Alcázar. Antonio Martínez Cascales llega a través de Tomi Maquinaria y Francisco García estará en nombre de Prevemur. «Hemos elegido estos perfiles porque apostamos por un consejo más empresarial», decía Tornel.