El Real Murcia se ha convertido en esta temporada 2018-2019 en el club de los enredos. Manolo Herrero y sus jugadores tendrán a final de curso material suficiente para escribir un libro sobre las múltiples complicaciones que han ido viviendo en su etapa como murcianistas. Con solo media campaña cumplida, los granas han sufrido lo habido y por haber. Empezaron con los impagos, siguieron con las promesas incumplidas de Víctor Gálvez, continuaron con las medidas de presión, vivieron prácticamente en directo un cambio de consejo de administración, han tenido de interlocutores a dos directores deportivos oficiales -Toni Hernández y Pedro Cordero- y a uno extraoficial -Xavi Juliá-, sufren actualmente las presiones para que se marchen o se bajen en suelo y, por si no acumulaban ya problemas en la mochila, ahora forman parte de una plantilla a cuadro.

Pese a que se ha conseguido cierta estabilidad institucional, a que las nóminas ya llegan a las cuentas corrientes de los jugadores y empleados y a que el bache de resultados de noviembre ya es historia, en lo deportivo el Real Murcia sigue siendo un auténtico caos. El último, o penúltimo, aprieto que está viviendo Manolo Herrero ha llegado justo en el mercado invernal. A diferencia del resto de clubes, con la llegada de enero, los murcianistas en vez de reforzarse se están debilitando semana a semana.

Para el choque de esta tarde en el campo del Villanovense, el preparador andaluz no ha podido completar ni la convocatoria. Ayer daba una lista de dieciséis futbolistas, dos menos de los 18 permitidos por la Federación, y todo porque, pese a la salida de siete jugadores -Héber Pena, Alfaro, Dani Pérez, Aquino, Migue Leal, Compagnucci y Corredera-, el Real Murcia no puede fichar al no ser capaz de desbloquear las denuncias ante la AFE.

Se ha convertido la plantilla grana en un grupo experto en saltar piedras en el camino. Pese a todos los problemas que se han vivido desde prácticamente el inicio de curso, el equipo está a tres puntos del cuarto clasificado, el San Fernando. Además, los de Herrero han logrado olvidar el bache de resultados de noviembre para encadenar seis jornadas sin perder -cuatro victorias y dos empates-. Con solo quince futbolistas de la primera plantilla disponibles -Forniés sigue sin entrar con el grupo a la espera de resolver su salida-, el técnico andaluz vuelve a contar para el choque de esta tarde en el Romero Cuerda con el delantero del Imperial Santi Bernal, que ya fue titular el pasado fin de semana.

Con tan pocos efectivos, Herrero apenas tiene para dudar. Con la línea defensiva fija -José Ruiz, Hugo Álvarez, Charlie Dean y Nahuel-, Maestre y Miñano volverán a estar en el centro del campo. La duda está en si Julio Delgado seguirá por el medio o actuará en el extremo en detrimento de Bernal. En caso de que el técnico apueste por esta última opción, Juanma o Armando podrían ser la novedad. Josema es fijo por la derecha, mientras que en la delantera se jugarán el puesto Chumbi y Manel Martínez.