El español David Ferrer, segundo cabeza de serie del Abierto de tenis de Río de Janeiro, avanzó hoy a semifinales al imponerse por 6-3, 4-6 y 6-2 al argentino Juan Mónaco, en un difícil partido de dos horas y tres minutos.

Ambos jugadores, que saltaron a la cancha de tierra batida en la pista central del Jockey Club Brasileño bajo un intenso sol, dieron la impresión de que querían zanjar el encuentro por la vía rápida, lo que les llevó a cometer algunos errores básicos.

Pero fue Ferrer quien acabó haciendo una mejor lectura del partido y puso a correr a Mónaco de un lado al otro de la pista, y quien controló el ritmo del juego en los momentos determinantes.

Una clara muestra fue el quinto juego del primer set, en el que el de Jávea hizo sudar al argentino antes de puntuar con un inapelable remate desde la red. En el siguiente juego, el tenista español, noveno en el ránking de la ATP, logró romperle el servicio a Mónaco, que actualmente ocupa el puesto 66.

Ferrer mantuvo esa diferencia hasta el noveno juego, en el que volvió a romperle el servicio al rival y terminó quedándose con la manga, con 6-3, gracias a un imparable 'ace'.

El segundo set no comenzó mejor para Mónaco que volvió a perder el servicio a las primeras de cambio.

Pese a verse detrás en el marcador de manera tan prematura, el argentino de treinta años tiró de garra y aguantó el ritmo de Ferrer, que también acabaría cediendo su servicio en el sexto juego.

Una segunda ruptura del servicio por parte de Mónaco terminó siendo definitiva y el suramericano se llevó el set por 6-4.

A partir de ese momento, el de Jávea, pese a que daba claras muestras de agotamiento, se vino arriba y se hizo dueño del juego en la tercera y definitiva manga.

Ferrer, que sólo cedió dos juegos ante su rival, recuperó su mejor tenis y cerró el marcador en 6-2 con un gran servicio.

El tenista español se jugará hoy el pase a la final contra el austríaco Andreas Haider-Maurer.

El Abierto de Río de Janeiro, único torneo del circuito ATP 500 de Sudamérica, celebra este año su segunda edición, en la que reparte 1,25 millones de dólares.