Pinarello, una de las firmas más prestigiosas de bicicletas del mundo, ha puesto al servicio de Alejandro Valverde la tecnología más avanzada para lograr que el murciano mejore su rendimiento en las contrarreloj. El ciclista del Caisse D'Epargne-Illes Balears estuvo durante dos días en la sede de la empresa, en Treviso, donde se sometió a un exhaustivo análisis que estuvo dirigido por el biomecánico Alessandro Mariano.

El equipo de Valverde tenía previsto desde hace meses que el ciclista se sometiera a un estudio por el que también han pasado grandes campeones como Miguel Induráin y Lance Armstrong. El perfil del próximo Tour de Francia, con 115 kilómetros de contra reloj individual -la crono por equipos ha desaparecido-, no ha tenido nada que ver en la visita del murciano a Treviso: "Estaba todo planificado desde hace mucho tiempo", aclaró Valverde.

Los resultados del trabajo no van a tardar en manifestarse en el rendimiento de Valverde. El ciclista se sometió a dos pruebas con el fin de mejorar la postura y la aerodinámica. Unos sensores conectados a los músculos de su cuerpo transmitieron la información necesaria a un ordenador para realizar las correcciones idóneas. En primer lugar, Valverde estuvo pedaleando sobre un rodillo durante 23 minutos a una potencia de 23 vatios y una cadencia de 90 pedaladas por minuto. El resultado fue inmediato, ya que el corredor mejoró un 30% el juego del tobillo en la segunda ocasión. "Hacía más fuerza con los cuádriceps que con los gemelos", explica Valverde.

La segunda prueba fue en carretera, con la bicicleta de contra reloj. Con sensores en cada una de las piernas, comenzó a rodar durante unos diez minutos detrás de un automóvil. Tras un breve descanso y bajar la posición del manillar, Valverde realizó de nuevo la misma prueba y mejoró su rendimiento un 15%.

La prestigiosa firma italiana, que es la misma que hace muchos años construyó la 'Espada' de Miguel Induráin, está ahora elaborando una bicicleta contra reloj a la medida de Alejandro Valverde.