En lo que llevamos de año, no hay un solo festival de cine que se precie sin un murciano entre sus nominados; ocurrió, por supuesto, en los Goya -y con la práctica totalidad de los premios de la industria audiovisual española, que se rindieron ante Eva Llorach-, pero también en los Oscar, con Marta Nieto como protagonista de Madre, nominado a Mejor Cortometraje de Ficción.

Pues bien, esta vez el turno ha sido para Cannes, que este fin de semana cerraba su septuagésimo segunda edición con acento español. ¿La culpa? De Pedro Almodóvar, Antonio Banderas (reconocido como Mejor Actor) y, evidentemente, de la última película del cineasta castellano-manchego, Dolor y gloria. Sin embargo, el intéprete malagueño no fue el único miembro del equipo del aclamado realizador español que se marchó a casa con el reconocimiento del jurado. También lo hizo el compositor guipuzcoano Alberto Iglesias, que logró con la banda sonora del filme un nuevo galardón en su trayectoria: el premio a la Mejor Música Original entre las 21 películas de la sección oficial.

No obstante, Iglesias no ha trabajado solo en la elaboración de las melodías que acompañan a la que es, para muchos, la cinta más personal de Almodóvar. En esta labor, ha contado con el apoyo de dos personas más, así como algunos externos, entre ellos, la murciana Alicia Morote, que, con el cargo de 'Preparación musical', «ha ejercido una labor fundamental encargándose de realizar las partituras orquestales». Y es que esta joven compositora ha mostrado en numerosas ocasiones sus dotes en este campo; sin ir más lejos, el pasado mes de diciembre mostró -de la mano de la Orquesta Sinfónica de la Región de Murcia- sus habilidades en el Auditorio Víctor Villegas de Murcia llevando a este formato las canciones de la banda de pop-rock Maldita Nerea.

Además, esta no es la primera vez que Morote (1988) trabaja con Alberto Iglesias -dueño total y absoluto de la música en el cine de Almodóvar desde La flor de mi secreto (1995) y nominado tres veces al Oscar-, ya que el nombre de esta murciana también aparece en los créditos de películas como Yuli (Icíar Bollaín) o Ma Ma (Julio Medem), ambas con banda sonora del laureado compositor vasco.

«La experiencia de ser parte del equipo Alberto es inigualable; es trabajar codo con codo con historia viva del cine», explica Morote, quien señala que sus creaciones «siempre fluyen, se mueven e innovan sin perder nunca la esencia de su identidad musical». Además, la murciana asegura que «en el equipo de Alberto no se pierde nunca la calma -a pesar de la exigencia a esos niveles-, así que literalmente una da lo mejor de sí en un ambiente tranquilo».

En cuanto a su trabajo para Dolor y Gloria, Morote recuerda que «el trabajo fue intenso, pero muy bonito. Mientras Alberto trabaja en la composición, en el equipo estamos preparando materiales para los ingenieros de sonido y las partituras para los músicos, todo al mínimo detalle. Te adentras mucho en la película, pues durante todo el proceso acabas viéndola un montón de veces, así que cada experiencia siempre contiene en el ambiente la esencia y el sello de la película».