El Ministerio para la Transición Ecológica abrió ayer un proceso selectivo para contratar a cuatro funcionarios interinos en la Confederación Hidrográfica del Segura con el objetivo de reforzar la plantilla que controla el regadío ilegal en el Campo de Cartagena. La medida llega una semana después de la visita de la ministra Teresa Ribera a la Región de Murcia, donde dijo que el personal dedicado a estas labores sumaría más trabajadores, ante la imposibilidad de abarcar una operación que en cinco meses pretende sellar y precintar las bocas de riego en estas parcelas sin derecho a agua.

Por un lado, la labor de estos nuevos técnicos se centrará en reforzar los servicios de control y vigilancia del dominio público hidráulico, en concreto al control sobre las parcelas que toman agua pese a que no están inscritas en el registro de la Confederación, así como la potestad para sancionar. Por otro lado, también se dedicarán a la valoración técnica y económica de los daños al espacio público que debe vigilar la CHS.

Los nuevos refuerzos también partiparán en la tramitación de expedientes administrativos en los que, como consecuencia de las inspecciones llevadas a cabo por los servicios de la Comisaría de Aguas, se requiera adoptar medidas cautelares previas al expediente sancionador por mantener un regadío ilegal, «así como tramitar la ejecución subsidiaria de las resoluciones sancionadoras adoptadas», señala la Confederación.

Las comunidades de regantes también recibirán el apoyo de estos técnicos para impulsar las medidas de protección cautelares que se aprobaron para el Campo de Cartagena cuando se declaró el acuífero en riesgo de no alcanzar el buen estado químico.