Un paracetamol seis horas antes de vacunarse con la dosis de AstraZeneca y otra pastilla cada ocho horas tras recibir la inmunización. Esta es la recomendación que desde las farmacias y las compañías farmacéuticas están haciendo llegar a los clientes que estos días están recibiendo la vacuna contra la covid-19 en función del protocolo establecido por el Ministerio de Sanidad. La reanudación de la campaña de vacunación con el fármaco de AstraZeneca tras la decisión de paralizar su uso por efectos adversos que debían ser estudiados ha provocado un repunte en la venta de paracetamol y fármacos derivados para evitar los efectos secundarios más comunes.

Nauseas, dolor de cabeza, fiebre alta o fatiga son algunos síntomas frecuentes que puede tener cualquier persona que se inmunice contra el coronavirus. Por ello el Ministerio de Sanidad recomendó el consumo de paracetamol antes y después de recibir la vacuna.

Diversas farmacias de la Región de Murcia consultadas apuntan a que este fármaco para disipar los efectos adversos de la vacuna está registrando una mayor venta, no mucha, pero sí se nota lo suficiente para asegurar que se están siguiendo las recomendaciones del Ministerio de Sanidad. Y es que los propios clientes avisan a los farmacéuticos que van directamente a estos negocios para adquirir paracetamol o derivados porque en poco tiempo, o ese mismo día, tienen cita para recibir la vacuna de AstraZeneca. Las compañías farmacéuticas también están enviando a las oficinas de la Región un mayor número de anuncios informativos sobre el uso de estos fármacos en relación con la campaña de inmunización.

Sanidad considera que el paracetamol ayuda a reducir sensiblemente las reacciones adversas a la vacuna de AstraZeneca que se puedan sufrir, como dolor muscular o cefaleas. El ministerio especifica que la cantidad a tomar es la equivalente a un gramo. En su guía de vacunación, Sanidad incluye la siguiente recomendación: «Se observan reacciones locales y sistémicas leves frecuentes tras la vacunación. Se puede utilizar dosis de 1 gramo de paracetamol previa a la vacunación, seguida de 1 gramo cada 6 horas durante las primeras 24 horas, lo que reduce significativamente el dolor local, la febrícula, los escalofríos, las mialgias, la cefalea y el malestar posvacunal, sin influir en la respuesta inmune».

La medicación profiláctica previa a la recepción de los inmunógenos de Pfizer o Moderna no está indicada por el Ministerio por falta de datos de los laboratorios.

Las reacciones más comunes detectadas tras la vacuna de Oxford y AstraZeneca siguen la misma línea que de las demás vacunas y son: sensibilidad en el lugar de inyección, en un 63,7% de los casos; dolor en el lugar de inyección, en un 54,2%; fatiga, en un 53,1%; cefalea, en un 52,6%; mialgias, en un 44%; artralgias, en un 26,4%; escalofríos, en un 31,9%; nauseas, en un 21,9%; y fiebre, en un 7,9%. Normalmente, acostumbran a ser de intensidad leve o moderada, y se marchan a los días. Además, suelen ser menos frecuentes y más leves cuando se administra la segunda dosis, y más reducidas y leves en personas de más edad. Recientemente, se ha cuestionado la seguridad de esta vacuna por la detección de algunos casos de trombosis y, después de su estudio, la Agencia Europea del Medicamento ha avalado su uso y seguridad, por lo que vuelve al mercado de países, como España, que habían paralizado temporalmente su suministro por precaución.

Las compañías aumentan su producción para tener existencias

Farmacéuticas como la compañías Ferrer ya ha preparado su planta en Cataluña para incorporar un turno de producción adicional a la línea de fabricación de Gelocatil, con lo que prevén aumentar la producción un 43%. Según explica la empresa, la recomendación del Ministerio de Sanidad de consumir una pastilla de paracetamol en el momento previo a la vacunación provocó un incremento del 18% de las unidades vendidas de Gelocatil. Por este motivo Ferrer ha adoptado medidas para garantizar provisiones de paracetamol para todo lo que queda de 2021.