Técnicos de Sanidad Animal comenzaron en la mañana de este sábado a montar el operativo necesario para el transporte de las reses que alberga el buque Elbeik. Apilaron en el Puerto de Cartagena junto al buque de ganado contenedores como los que utilizaron para transportar en camiones, tras ser sacrificadas, los cuerpos de las 864 vacas del barco Karim Allah a la planta de residuos de Abanilla para ser incinerados.

Por este despliegue parece que el veredicto del servicio de veterinarios es que hay que sacrificar los animales, aunque todavía el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) no lo ha anunciado públicamente. Si finalmente se opta por el sacrificio, el operativo para realizar la eutanasia en el puerto será bastante complicado debido al elevado número de reses que transporta el Elbeik, 1.800.

De hecho, en el caso del Karim Allah se montaron una carpa y corrales para bajar a los bovinos del buque y proceder al sacrificio de las reses en el mismo puerto.

Mientras se decide el futuro de las reses, los servicios veterinarios de Sanidad Animal con Equipos de Protección Individual llevan todo este puente de San José realizando la inspección del buque de ganado y determinando el estado de salud de las 1.800 vacas que lleva a bordo.

Tras la llegada de este barco no deseado por diversas instituciones regionales a la Dársena, un amplio despliegue de patrullas de Guardia Civil y Policía Local y dos camiones comenzaron a descargar fardos de alimento a bordo para las reses, que han estado tres meses a la deriva en aguas del Mediterráneo después de haber zarpado desde Tarragona y haber sido rechazadas en Turquía.

Durante estos tres meses de navegación, ya han muerto a bordo más de un centenar de animales y la tripulación se encuentra «al límite» de sus fuerzas, denuncian desde Igualdad Animal. «Las inclemencias meteorológicas que han soportado y el hecho de que vaya completamente cargado ha propiciado la muerte de los animales», denuncian.