El estado de las aguas del Mar Menor invita al optimismo a día de hoy, e incluso los parámetros de calidad marcan registros previos a la DANA de 2019. Este fue ayer un hecho reseñable que quiso remarcar el consejo de Medio Ambiente, Antonio Luengo, durante la celebración del Foro de Coordinación Interadministrativo de la laguna. Los valores de clorofila se encuentran en 0,52 µgr/L, la oxigenación media es de 7,45 mg/L y la turbidez de 1,86 FTU, «parámetros que muestran una gran estabilidad del ecosistema, que se viene prolongando durante los últimos meses», destacó Luengo. Junto a ello, la temperatura se sitúa en 14,94 grados, la transparencia supera los cinco metros de media (5,14 metros) y la salinidad es de 41,44 gramos por litro. Estos datos, como el de la profundidad, facilita que las praderas marinas realicen la fotosíntesis. Por otra parte, el consejero ha anunciado que la Comunidad invertirá dos millones de euros en las tareas de retirada de biomasa vegetal y la limpieza de áreas marítimas del Mar Menor durante los años 2021 y 2022.

En cuanto a las tareas incluidas en la limpieza de áreas marítimas, el consejero destacó «la recogida de residuos flotantes como artes de pesca o restos de embarcaciones, la recogida de vertidos líquidos como hidrocarburos, aceites o espuma que pudieran derivarse de un accidente o episodio climatológico, así como la retirada de elementos sumergidos». Para ello se contará con un equipo de inmersión, otro de retirada de residuos desde tierra y otro para retirar embarcaciones abandonadas o semihundidas.

El Foro ha servido también para actualizar el estado de avance de los ocho proyectos estratégicos iniciados por la Comunidad en 2019. Ejemplo de ellos es el proyecto de biorreactores que contempla la construcción de un biorreactor proyectado para reducir el nivel de nitratos del agua que transcurre por la Rambla del Albujón y el D7, y la instalación de un filtro verde para tratarlas antes de su llegada al Mar Menor.

El consejero ha destacado que «ya se dispone de la autorización de vertido por parte de la Confederación Hidrográfica del Segura, necesaria para la entrada al Mar Menor de las aguas ya tratadas, y estamos ultimando los trámites para iniciar la licitación». Entre ellos, destaca la necesidad de contar con la autorización de la CHS para realizar las obras, a la vez que se inicia el proceso de expropiación de los terrenos donde se ubicarán los biorreactores.

Hay que recordar que la redacción del proyecto constructivo concluyó en febrero de 2020, iniciándose en ese momento la ronda de consultas institucionales y de solicitud de informes preceptivos a las distintas administraciones públicas implicadas.