La mejor vía para restaurar los humedales de España es enfocarse en prevenir la degradación, lo que significa plantear un «cambio profundo de modelo y de las políticas sectoriales» y el ahorro de millones de euros en su recuperación, según un comunicado de la Sociedad Española de Ornitología SEO/BirdLife emitido este lunes, víspera del Día de los Humedales. Con ocasión del 50 aniversario del Convenio Ramsar sobre la conservación de zonas húmedas y aves acuáticas, firma en la que SEO/BirdLife representó a España, la organización conservacionista hace hincapié en que cada año se destinan millones de euros en la restauración de humedales degradados en España.

La organización recuerda que el ahorro podría resolverse con un modelo de gestión de estos ecosistemas que cumpla la Directiva Marco del Agua, como son los planes hidrológicos definitivos que deben aprobarse en 2021.

La factura de restaurar los daños del modelo actual «es exorbitante», advierte el responsable de programa de aguas de SEO/BirdLife, Roberto González, quien explica que restaurar las condiciones ambientales de tan solo tres de los humedales más amenazados en España -Doñana (500 millones), delta del Ebro (570) y mar Menor (620)- conllevaría una inversión mínima de 1.690 millones de euros.

Inversión, añade González, que las administraciones «tratan de esquivar, a pesar de que ya solo quedan seis años para cumplir con la Directiva Marco del Agua (DMA)».

Para la organización ecologista, la dimensión de la factura que provoca la desconexión entre las políticas de protección de la naturaleza y el agua con otras políticas como la agraria, el urbanismo o la ordenación del territorio «es, a todas luces, excesiva», señala el responsable de SEO/BirdLife.