Antes de ejercer como enfermera, Laura Balanza cogía el teléfono del coronavirus y al otro lado de la línea escuchaba la muerte. La voz desgarrada de los familiares no se le olvida. Los pacientes fallecían en casa o ya estaban muertos, y ella escuchaba a los hijos, a las mujeres o a los maridos llorar.

«Habían perdido a alguien y escucharles era lo más duro que he tenido que afrontar como sanitaria». Laura ha viajado por la pandemia y sus olas en una ambulancia. Ha visto y sigue viendo la tristeza en los ojos de sus compañeros. Señala el cansancio, y que nosotros, la población, estamos muy perdidos. «Nadie sabe qué es esto hasta que lo vive desde dentro». Le hace gracia una cosa, que se dijera que en La Manga no ha habido coronavirus: «Había casos. No ha existido nunca una pausa entre la primera y la segunda ola. El verano ha sido como un falso espejismo en el que creíamos que todo estaba bien pero el virus no había desaparecido».

Lo dice porque ella ha trabajado en el Punto de Atención Continuada de La Manga y en el hospital Los Arcos del Mar Menor, con contratos temporales del Servicio Murciano de Salud. Laura es la mejor. La Sociedad Española de Excelencia Académica ha situado a Laura Balanza Cañete, egresada del Grado en Enfermería por el Campus de Cartagena de la Universidad Católica de Murcia, en la primera posición de su ranking de los mejores expedientes del país de graduados en esta titulación. Si le preguntan que cómo se consigue la excelencia académica, ella dirá que esto es pasión, pura pasión.

Tiene 29 años y nació en Cartagena, es la mayor de su clase del Máster en Investigación en Ciencias Sociosanitarias de la UCAM. La diferencia de edad la lleva bien y su siguiente paso es hacer un doctorado en Enfermería. Ahora investiga sobre las patologías más prevalentes en los buceadores profesionales, pero ella dice que le gusta investigar de todo: «No tengo un límite en este campo».

Ha creado dos empresas relacionadas con la formación en socorrismo y recibió el premio a la mejor comunicación en formato póster en el Congreso Nacional de Enfermería Dermatológica. Laura, que dice darle verguenza hablar sobre ella y no sabe cómo va esto de las entrevistas, saca de repente la artillería, y tiene para todos. «Los sanitarios estamos desbordados, muy tristes. Falta personal, falta cubrir vacantes. Ya no se cubren bajas por covid dentro del sistema sanitario murciano, llaman para trabajar días sueltos en distintos sitios. Ser enfermero es estar en una profesión inestable y nos sentimos maltratados».

Su dedo señala a todas las administraciones y les acusa de falta de organización y de gestión de la pandemia: «Ha sido nefasta». El refuerzo que necesitaba la Atención Primaria en la Región no ha llegado. «Es la puerta de entrada de los pacientes con o sin covid al sistema sanitario y lleva maltratada mucho tiempo». Los gobiernos faltan a la verdad a los ciudadanos y no son lo suficientemente claros, explica. «No podemos esconder nada, van a venir meses muy duros. No vale el toque de queda o cerrar negocios si las administraciones no son capaces de controlar a la población». Hay una cosa positiva, una que saca de todo esto. Al otro lado del teléfono también había esperanza, un ´baby boom´ durante el confinamiento que, ante cualquier embarazo del que se enteraba, le sacaba una sonrisa.

"Sé los riesgos a los que me enfrento"

Laura Balanza, a los pocos días de terminar sus estudios de grado en el Campus de Los Dolores, comenzó a trabajar de enfermera y ahora compagina su actividad laboral con sus estudios del Máster en Investigación en Ciencias Sociosanitarias de la UCAM.

¿Cómo vivieron usted y su marido la primera ola de la pandemia?

Mi marido es sanitario y apenas nos veíamos. Teníamos mucho cuidado y a mis abuelos por ejemplo no los he visto durante mucho tiempo. Tengo claro los riesgos a los que me enfrento y podemos caer enfermos por la covid o por cualquier otra enfermedad. Esto hay que asumirlo.

¿En qué le gustaría especializarse?

Me encantan las urgencias pero no existe especialidad sanitaria en este campo. Aún así trabajo en varios ámbitos como en la hospitalización o en urgencias de ambulancia.

¿Cómo cree que la población ve el trabajo de un enfermero?

Entiendo que la profesión era muy desconocida hasta hace poco pero la gente nos ha respetado mucho como profesionales durante esta pandemia.