Según un estudio reciente, el sector alimentario es uno de los más afectados por las consecuencias del cambio climático a escala global pero, a su vez, es responsable del 25% de las emisiones de CO2 y del 70% del consumo de agua. Estos datos son un ejemplo de la importancia del sector agroalimentario a nivel mundial.

Sin duda, este sector juega un papel muy importante en el cumplimento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y su reto reside precisamente ahí, en conseguir las metas fijadas por algunos de los ODS. En concreto, donde más se puede notar la actuación es en el Objetivo 2: Poner fin al hambre, lograr la seguridad alimentaria y la mejora de la nutrición y promover la agricultura sostenible.

La industria agroalimentaria puede proponer soluciones vitales para el desarrollo y para la eliminación del hambre, porque con una gestión adecuada, puede fomentar el desarrollo de la población que vive en zonas agrícolas así como contribuir a la protección medioambiental.

El cambio climático, por ejemplo, repercute sobre los recursos y aumenta los riesgos asociados a los desastres naturales. Como consecuencia, se genera un impacto negativo en zonas agrícolas que, en muchos casos, se encuentran en las zonas más desfavorecidas. Por ello debemos ser muy conscientes de la importancia que cobra cualquier mejora en el ámbito de la sostenibilidad que lleven a cabo las empresas del sector alimentario y agrícola.

La industria agroalimentaria puede incidir también, y de forma relevante, en el Objetivo 12: Garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles. Fomentar el uso eficiente de los recursos y la energía ayudará a lograr planes generales de desarrollo, que rebajen costes económicos, ambientales y sociales, sin descuidar que también permitirá que aumente la competitividad.

Consumir y producir de forma más sostenible implica realizar más y mejores cosas con menos recursos. Es decir, generar beneficios a través de la actividad empresarial reduciendo la utilización de los recursos, la degradación y la contaminación, logrando al mismo tiempo una mejor calidad de vida.

Son precisamente estos objetivos en los que Estrella de Levante está trabajando directa o indirectamente, centrados especialmente en mejoras en materia de sostenibilidad. Desde hace mucho tiempo creemos que tenemos la capacidad de mejorar el mundo en el que vivimos. Por este motivo, se han implementado mejoras para un uso más eficiente de los recursos, la generación de menos residuos y el ahorro de agua y energía.

Los ejes principales de la política medioambiental de Estrella de Levante son el impulso de la sostenibilidad en todas las actividades que realiza, favorecer el uso de recursos de proximidad (por ejemplo el 95% de proveedores en la Península), minimizar el impacto ambiental, prevenir la contaminación e impulsar las actuaciones destinadas a reducir, reutilizar y reciclar.

La cervecera dispone de la certificación ISO 14001 en materia de Seguridad y Salud en el trabajo y ha conseguido que en el consumo de agua se reduzca desde al año 2008 un 65%, lo que equivale al consumo de 8 días de una ciudad como Murcia. De la misma manera, se ha logrado reducir un 65% el gasto de gas y un 35% gasto en electricidad. Toda la energía que se compra es renovable y permite reducir un 53% las emisiones de CO2.

Sin duda, la tecnología es un gran aliado para conseguir, por ejemplo, un uso eficiente del agua como recurso escaso. Por ejemplo, estamos aplicando el cálculo de la huella hídrica en todo el proceso de la elaboración de cerveza, desde el campo hasta la mesa.

Pero para ser capaces de dar un salto importante adelante hay que tener una visión muy integral, lo que nos ha llevado a implementar el modelo de economía circular que se basa en reducir-reciclar-reutilizar. Esto conlleva la colaboración con proveedores y clientes, lo que pone de manifiesto que no solo es la acción de las personas lo que ayuda a la preservación del medioambiente, sino, en gran medida, la de las empresas.

Otro aspecto clave es el reciclaje. En este sentido, actualmente se valoriza el 99% de los residuos que generan. Asimismo, internamente apuesta por colaborar con asociaciones u organizaciones no gubernamentales para el reciclaje de tapones, ropa usada, libros, etc. El avance de Estrella de Levante en el terreno de la ecoeficiencia y la sostenibilidad va íntimamente ligado al esfuerzo de cada uno de sus empleados. Gracias a un plan de formación continuo, en Estrella de Levante cuentan con una plantilla concienciada con la calidad y el trabajo seguro, al tiempo que mantiene un fuerte compromiso con el medioambiente.

Durante la crisis sanitaria provocada por la covid-19, la compañía ha continuado estudiando cómo mantener la aplicación de la economía circular en todas aquellas acciones que está llevando a cabo. En este sentido, actualmente la cervecera está sustituyendo en todos sus clientes de hostelería los barriles que habían quedado en los establecimientos al inicio del confinamiento, cuando el Gobierno decretó el primer estado de alarma.

Con el fin de aprovechar toda esa cerveza, Estrella de Levante ha reutilizado los casi 500.000 litros de cerveza retirada generando electricidad equivalente al consumo mensual de más de 230 hogares. Se evita así emitir más de 25.000 de kilogramos de CO2 a la atmosfera. Una acción que se suma a la estrategia medio ambiental de la compañía y su apuesta por la economía circular.

En la misma línea, cada semana la cervecera ha enviado a la Alcoholera 25.000 litros de alcohol para producir mezcla hidroalcohólica. Con esta cantidad, la Alcoholera ha podido fabricar más de 10.000 litros de alcohol de 96º.

Si las compañías no aplican medidas en materia de sostenibilidad, es poco probable que se consiga cumplir con los ODS establecidos para 2030. Pero no solo en el sector agroalimentario, sino en general porque, es con el trabajo conjunto que se pueden conseguir importantes logros. Se trata, por lo tanto, de tener un enfoque sistémico y lograr la cooperación entre los participantes de la cadena de suministro, desde el productor hasta el consumidor final.