El pasado 24 de abril venía a este mundo Marta,. Llegó en pleno confinamiento y no pudo haber abrazos a su alrededor, ni visitas. Llegó a una habitación vacía de hospital caldeado por el cariño de sus padres, Juan Miguel y María José. Ayer, esos abrazos llegaron y supieron a gloria. Ana -Hermana de María José- que vive en Cehegín, aprovechó el cambio de fase para poder ver a su nueva sobrina. Según explica el padre, las tres se fundieron en un abrazo emocionado. «Ana ha podido abrazar a su sobrina, que únicamente había visto por vídeo y fotos», explica el padre, quien recuerda que «cambió mucho la situación de cuando nació nuestro primer hijo y las visitas que tuvimos en la habitación, y este segundo parto». La pequeña Marta sigue teniendo muchas visitas pendientes, como la de una de las hermanas de Juan Miguel, que reside en Madrid, y hasta el siguiente cambio de fase no podrá verla, y la de su bisabuela, que esa será en muy pocos días.