Caravaca, Judío y Moro, Bajo Quípar y Bullas, Quibas, Bajo Guadalentín, Mula, Águilas, Mazarrón, Baños de Fortuna, Cuaternario de Fortuna y Sierra de Cartagena. Estas son las once nuevas áreas delimitadas como vulnerables a la contaminación por nitratos de origen agrario en la Región de Murcia que figuran en la resolución de la Dirección General de Agricultura, Ganadería, Pesca y Acuicultura hecha pública ayer y recogida en el Boletín Oficial de la Región de Murcia (BORM).
Son superficies territoriales «cuya escorrentía o filtración puede afectar a masas de agua contaminadas por nitratos», según se recoge en la resolución.
Además, Agricultura amplía las zonas de agua subterránea ya previamente designadas, e incluye en esta resolución al Alto Guadalentín y Puentes, Vega Alta y Media del Segura y al Campo de Cartagena.
En cuanto a las aguas costeras, mantiene la laguna del Mar Menor.
Teniendo en cuenta que, una vez identificadas las masas de agua afectadas, corresponde a la Comunidad Autónoma delimitar las áreas, Agricultura ha considerado «conveniente» acordar un periodo de información pública para que cualquier persona física o jurídica pueda examinar el expediente y formular alegaciones.
Por «razones de urgencia», el periodo de información pública se reduce a quince días naturales, contados a partir del día siguiente a la publicación de la Resolución en el BORM, es decir, a partir de ayer, 2 de julio.
Asimismo, se informa de que para garantizar la sostenibilidad ambiental en el entorno del Mar Menor, la aplicación del Código de Buenas Prácticas Agrarias de la Región de Murcia «tendrá carácter obligatorio» en las zonas que se designan como vulnerables a la contaminación por nitratos de origen agrario.
Y se da un plazo de un año para aprobar el o los programas de actuación correspondientes, «con objeto de prevenir y reducir la contaminación causada por los nitratos de origen agrario».
En la Resolución, firmada por el director general de Agricultura, Francisco José González Zapater, se recuerda que la Directiva 91/676/CEE, de 12 de diciembre, relativa a la protección de las aguas contra la contaminación producida por nitratos de origen agrario, obliga a los Estados miembros a identificar las aguas afectadas; establece criterios para designarlas como zonas vulnerables; y determina la obligación de los Estados a modificar o ampliar las designaciones «en un plazo adecuado o como mínimo cada cuatro años».
También se apunta que la Resolución de 24 de marzo de 2011 de la Dirección General del Agua (del entonces Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino), determinó las aguas afectadas por la contaminación, o en riesgo de estarlo, por aportación de nitratos de origen agrario en las cuencas hidrográficas intercomunitarias (BORM núm. 111, de 10 de mayo de 2011).
«Después de una colaboración muy estrecha e intensa con el Organismo de Cuenca (CHS), éste ha remitido información de nuevas masas de agua afectadas por la contaminación por nitratos de origen agrario, o en riesgo de estarlo», añade, que son las que finalmente se recogen en la resolución.
Buena noticia
La Plataforma Pacto por el Mar Menor se felicitó ayer por la publicación de la resolución de Agricultura en el Borm, y especialmente porque se recoge la obligación de aplicar el Código de Buenas Prácticas Agrarias en estas zonas, si bien recordó que desde 1980 la comunidad científica ha estado alertando sobre los efectos de la agricultura intensiva, «sin que en estos casi 40 años se haya hecho nada por evitar la llegada de nutrientes a la laguna salada».
Este colectivo también lamentó que durante más de cuarenta días seguidos «llevamos denunciando a través de vídeos en redes sociales y medios, la entrada de aguas con alto contenido en nitratos (según análisis de laboratorio) en Los Alcázares, desde uno de los más de 30 puntos que arrojan agua a la laguna, sin que hayamos visto intención de corregir su origen».
Por último, el Pacto también aplaudió la información que aparece en el Twitter de Canal Mar Menor, el sitio web oficial de la Consejería de Medio Ambiente, relativa al análisis de la calidad de las aguas de baño, «una información que hemos estado reclamando desde que esta plataforma se puso en marcha hace casi cuatro años».
