Durante los últimos días toda la nación ha vuelto su mirada hacia Almería. Desde que desapareciera el pequeño Gabriel en Las Hortichuelas, miles de personas no han dudado en echar una mano en las tareas de búsqueda y buena parte de la sociedad española ha mostrado nuestro apoyo y solidaridad con la familia cuando se conoció el fatal desenlace.

Más cerca de Murcia, en Caravaca de la Cruz, la tragedia también golpeó hace años a la familia de Antonia Martínez, cuya hija Mari Cruz Sánchez, perdió la vida a manos de Said Quamm tras agredir con el mismo cuchillo con el que la mató a otras tres mujeres. Antonia lucha porque, como mínimo, cumpla íntegramente su condena, y es partidaria de la prisión permanente revisable.

¿Cómo ha vivido estos días?

Fatal, francamente. Con el corazón roto. Te quedas sin fuerzas porque esto no hay quien lo aguante. Los que tenemos la herida lo vivimos con más angustia. Sé perfectamente como se sentirán esos padres cuando despierten, yo todavía no me creo que mi hija esté enterrada y subo todas las semanas a verla. Los padres que hemos vivido está situación lo vemos todo de otra manera y nos afecta mucho más, recuerdo que cuando sucedió la desgracia de Alcáçer lloré, pero fue muy distinto a otros casos que han sucedido después del asesinato de mi hija.

¿Mantiene contacto con los otros padres que han sufrido una desgracia igual?

Sí, durante estos días he hablado con el padre de Mari Luz, el día que apareció la camiseta de Gabriel lo llamé, él quería ser positivo. Después de que apareciera el pequeño muerto no he tenido el valor de volver a llamarlo. También he hablado con el abuelo de Marta de Castillo, él me decía cuando apareció Diana que «ellos por lo menos saben dónde llevar flores, y nosotros, qué». Te parte el corazón ver estas cosas tan injustas, sobre todo para los que tenemos la herida tan fresca, una herida que nunca cicatriza.

Desde el asesinato de Mari Cruz ha luchado por el cumplimiento íntegro de las penas...

He movido todo lo que estaba en mi mano, he llegado a bajar a Murcia andando para pedir una cita con el Ministro, ahora noto que me faltan las fuerzas. Dicen que son muchos años pero, ¿cuándo salen las víctimas? ¿Cuándo voy a ver a mi hija? Otra cosa es que nosotros no tenemos ayudas de ningún tipo. La gente muchas veces no llega a entender que yo no pido para mí, que lo mío no tiene solución, pido para otros padres. Para que reincidentes no salgan a la calle y destrocen la vida de otras familias.

¿Cómo ve que se derogue la prisión permanente revisable?

Que digan que 25 años son muchos años en la cárcel...yo aguanto 25 años esperando a que salga mi hija. El asesino y el violador tendrían que salir de la cárcel cuando salieran sus víctimas de donde están enterradas. A mí ver como el otro día 'el Chicle' le decía a sus padres: «tranquilos, me van a pedir homicidio, en siete años ya estaré fuera, y con tres o cuatro de permiso»...no hay derecho. ¿Cuándo tendrán permiso las víctimas?, me pregunto yo.