Decenas de facultativos de la Región de Murcia han pasado por el Programa de Atención Integral al Médico Enfermo (PAIME) desde que se puso en marcha hace unos doce años, principalmente a causa de trastornos mentales y por adicción a sustancias tóxicas, como drogas o alcohol. Sin embargo, el programa también está abierto a otras patologías, como pueda ser el caso de médicos afectados por sida.

El Paime, centrado en profesionales en activo, tiene por objetivo que quien ejerza la profesión «lo haga en las mejores condiciones posibles», explica la presidenta del Colegio de Médicos de Murcia, Isabel Montoya, que comenta que actualmente 24 médicos están siendo atendidos a través del programa en la Región.

Los pacientes son tratados en un ámbito «donde se respeta totalmente la confidencialidad del caso» y para que pueda reintegrarse a sus labores «con todas las garantías». El programa no pretende castigar o estigmatizar a nadie.

«El médico es muy mal paciente, no suele reconocer tan claramente en él, como en otro paciente, que tiene un problema, y tiende a automedicarse», apunta la presidenta, destacando que hacer consciente a un facultativo que no está en sus plenas facultades para ejercer es uno de los puntos que recoge el Código Deontológico.

«Dice bien claro que cuando un doctor no está en condiciones de ejercer hay que instarle a pedir ayuda y si el tema es serio, decirle que si no lo hace, nosotros le vamos a decir que no está en condiciones de ejercer».

En el Colegio tienen claro que para mejorar el servicio que presta este programa se debe lograr la confianza de todos los médicos, tanto los que precisan ayuda como los que no. «La confianza es vital para que el médico enfermo se sienta seguro para poder solicitar ayuda bien al Colegio directamente, o bien a otro compañero», destaca la doctora.

Ayuda institucional

El Paime está implantado en todas las comunidades autónomas, donde, en su mayoría, cuenta con apoyo institucional. No ocurre lo mismo en la Región de Murcia. «Es una de las asignaturas que tenemos pendientes con Sanidad», indica Isabel Montoya.

La Consejería subvencionaba el programa a través de un convenio hasta el año 2009, porque a los médicos que se atienden son, en un 90 por ciento, trabajadores de la sanidad pública. Esta partida económica ayudaba a cubrir parte de los gastos que genera el programa, ya que el Colegio se hace cargo del pago de los tratamientos.

Los recortes se llevaron esta ayuda, y, desde entonces no se ha recuperado. Sólo en Aragón, Valencia y Baleares están en la misma situación que en Murcia.

Otros apoyos

Además de la asistencia sanitaria, el Paime también proporciona atención social, apoyo legal y asesoramiento laboral.

Este programa sigue las experiencias similares de otros países, especialmente en Estados Unidos, Canadá y Australia, que muestran cómo los programas específicos para médicos obtienen mejores resultados que los servicios destinados a la población en general, tanto por el menor número de abandonos como por un nivel superior de rehabilitaciones.

Debido a que tras la valoración de su caso por el clínico correspondiente se puede requerir una etapa de ingreso hospitalario, el Colegio ayuda económicamente al médico a sufragar los gastos que se originen.

Si el enfermo debe seguir un tratamiento ambulatorio, el encargado de la coordinación del Paime designará a un médico responsable para el seguimiento del tratamiento.