La Asamblea Regional ha rechazado esta mañana la propuesta de gasto no financiero para la comunidad autónoma para 2016, ya que toda la oposición (PSOE, Podemos y Ciudadanos, con un total de 23 votos frente a los 21 del PP) ha votado en contra.

Se trata de la primera ocasión en que se produce esta situación desde que en 2012 se aprobó la ley de estabilidad presupuestaria y, tras el debate, el consejero de Hacienda, Andrés Carrillo, ha insistido en que el Gobierno seguirá trabajando para sacar adelante el techo de gasto ya que es "la única puerta de entrada a los presupuestos", para lo que recurrirá al diálogo y a la negociación con todos los grupos políticos.

Así, se trabajará desde "ya mismo" para incluir posibles modificaciones que permitan acercar posturas con la oposición, aunque ha insistido en que se trata de un documento muy técnico y con poco margen para incluir cambios.

Durante su intervención en el pleno, Carrillo ha recordado que el límite del gasto no financiero, que se ha fijado en 4.100 millones de euros, se calcula en función de la previsión de ingresos no financieros (3.958 millones de euros, un 5,9 por ciento más que en 2015), el límite de déficit (fijado en el 0,3 por ciento del PIB regional) y de los ajustes de contabilidad nacional (una partida meramente técnica que ascenderá a 55 millones).

No aprobar el techo de gasto, ha alertado, impediría debatir un nuevo presupuesto para 2016 y tener que prorrogar el de 2015, con lo que no se podrán abordar los compromisos adquiridos y quedarían en el aire actuaciones como la devolución a los funcionarios de la parte correspondiente de la paga extra o su incremento salarial, la apertura de 300 nuevas plazas en centros de mayores, el acuerdo de financiación para las universidades públicas, la renovación de los conciertos en educación o el impulso de infraestructuras como el AVE.

El diputado del PP Fernando López Miras ha apoyado esas argumentaciones y ha insistido en que el techo de gasto es un cálculo "extremadamente técnico que resulta de una fórmula objetiva" y por lo tanto no puede plantearse otra cifra diferente, puesto que no sería real.

Sin embargo, el resto de los partidos han considerado que sí hay margen para modificaciones, y todos ellos han lamentado la falta de negociación previa al debate de hoy.

El diputado socialista Ángel Rafael Martínez ha justificado el voto en contra de su partido señalando que la cifra ofrecida es "irrelevante" porque no se cumplirá, igual que en los últimos años se han incumplido de forma sistemática tanto las previsiones de ingresos como el objetivo de déficit, y ha lamentado que la Región de Murcia votara a favor de ese límite para inmediatamente reconocer que no podrá cumplirlo, lo que ha calificado como un ejercicio de "anarco civismo".

Tampoco se cumplirá, ha dicho, el objetivo de deuda, que debería quedarse en torno a los 7.200 millones, cuando actualmente roza ya los 7.500 millones, a la vez que los compromisos adquiridos suponen incrementos en los gastos que tampoco se podrán llevar a cabo.

En cuanto a Podemos, el diputado Antonio Urbina ha dicho que su partido no apoya este techo de gasto porque confirma que se quiere mantener la misma "política de recortes y austeridad" aplicada hasta el momento y que ha dejado indicadores de pobreza y paro elevadísimos que constatan el fracaso de ese modelo, a la vez que depende de unos presupuestos del Estado que "tienen fecha de caducidad", puesto que la Comisión Europea ya ha indicado que habrá que recortar entre 7.000 y 10.000 millones de euros.

Podemos se ha mostrado abierto a negociar un techo de gasto con unos 350 millones de euros adicionales que permitirían introducir políticas contempladas en su propuesta de plan de emergencia para la región, y ha subrayado que no es cierto que una prórroga de los presupuestos impida el cumplimiento de los compromisos, puesto que hay mecanismos para modificar las cuentas públicas.

Por último, el diputado de Ciudadanos Miguel Ángel López Morell ha considerado que el techo de gasto constata dos "graves errores": por una parte, la inadecuada política presupuestaria de las últimas dos décadas, con desfases en partidas de ingresos y gastos y la incapacidad de lograr adecuada financiación, y por otra, la falta de una auténtica "voluntad de regeneración democrática" por parte del Ejecutivo.

Así, ha señalado que las cifras planteadas están "infladas" y no habrá recursos suficientes para cumplir con los compromisos adquiridos ni con el déficit, a la vez que ha insistido en que, aunque Ciudadanos pudiera transigir con estas cuentas, no lo hará con la falta de voluntad del Gobierno de sacar a los imputados de sus filas, como está ocurriendo en el caso de la alcaldesa de Torre Pacheco. EFE