Lo novedoso de esta red de prostitución que ofrecía menores a la carta es que, además de manejar la tecnología (Whatsapp y redes sociales) para captar tanto víctimas como clientes, es que lo tenía todo bajo control. Incluso la forma para que los padres de las jóvenes explotadas no se enteraran nunca de dónde salía el dinero del que disponían, cada vez con más abundancia, sus hijas.

Así, el comisario jefe de la Brigada de Extranjería y Fronteras, Alfonso Navarro, relató que el padre de una de las menores quiso comprobar si era verdad la historia que le habían contado su hija para justificar el dinero del que disponía. La menor le había dicho que había encontrado un trabajo cuidando a un niño pequeño. Un día el padre decidió seguirla. Advertida la trama de las sospechas del progenitor, una de las cabecillas ideó un montaje. Así, utilizó a un sobrino suyo, lo subió en un carricoche y lo preparó todo para que el padre viera la escena y se creyera la mentira que le había contado la hija.

En otro de los casos, según señaló el comisario Navarro, una de las mejores, que pensaba que su trabajo, como le habían dicho en un principio, consistía en darle un masaje al cliente, se negó a mantener relaciones sexuales con él, por lo que éste la forzó.

Entre los clientes, según señaló la asociación APRAMP al diario 'La Razón', habría un guardia civil retirado, aunque este extremo no fue confirmado por las autoridades policiales murcianas.

El director general de la Policía, Ignacio Cosidó, señaló que, con el fin de luchar contra la trata de seres humanos para fines de explotación sexual, el ministerio del Interior puso en marcha un plan específico en abril de 2013 y, desde entonces, se han desarrollado 462 operaciones en toda España, con 1.450 detenidos, liberando y asistiendo a 641 víctimas, prácticamente todas ellas mujeres. De ellas, 76 eran menores, según el director general de la Policía.

Cosidó indicó que uno de cada tres casos de abusos sexuales que se producen en España tienen como víctima a un menor, lo que eleva la cifra a 1.500 casos en toda España durante 2014.

El director general explicó que entre la sociedad existe «una gran sensibilidad» en relación con este tema. De hecho, tanto la dirección de correo electrónico trata@policia.es como el número de teléfono 900 10 50 90, dedicado especialmente a este tema ha recibido más de 2.000 llamadas o correos que han permitido poner en marcha «un número importante» de estas investigaciones.

De esta forma, el responsable ministerial reclamó a los padres que se pongan en contacto con la Policía Nacional ante cualquier sospecha motivada por comportamientos infrecuentes en sus hijos, como que su nivel de ingresos sea desproporcionado, o porque haya recibido algún tipo de oferta sospechosa.