Síguenos en redes sociales:

Justicia

Los juzgados se llenan de parados

Murcia es la comunidad autónoma con mayor incremento de causas por despido en las salas de lo social. Desde el inicio de la crisis el número de estos juicios se ha triplicado y en la mayoría de casos el empresario ni siquiera ejerce su defensa

Los juzgados de lo social de la Región de Murcia también están notando las consecuencias de la crisis económica. En concreto, desde que la desaceleración de nuestra economía comenzara a principios de 2008, el número de causas por despido al que tienen que hacer frente se ha triplicado.

Murcia es, de todas las comunidades autónomas, la que ha experimentado un mayor crecimiento en este tipo de procesos. En 2007 fueron poco más de 2.000 los asuntos de este tipo que llegaron a estos juzgados. Dos años después, la cifra alcanzó los 6.454. Además, cada uno de los siete juzgados de lo social de la Región se encargó en 2008 de casi 900 procesos judiciales, mientras que en 2.010 la cifra podría alcanzar los 2.200, aunque se prevé que la subida de este tipo de causas se estabilice durante el próximo año.

Una situación difícil de llevar para los magistrados que se verá aliviada por la creación de un octavo juzgado, prevista para el 31 de diciembre. Mientras tanto, el plan de refuerzo aprobado por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), que finalizó el 31 de Julio, está ayudando a sobrellevar la situación. El juez Gascón explica que desde mediados de 2008 el repunte de casos por despido está siendo «alarmante». El CGPJ ya confirmó con sus estadísticas esta situación, por eso se aprobó el plan de refuerzo para los juzgados de lo social.

El incremento está teniendo una consecuencia especialmente preocupante en el día a día de los juzgados, y es que su tiempo de respuesta casi se ha duplicado. Mientras que hace dos años se tardaba dos o tres meses en alcanzar una sentencia, ahora ya son casi cinco los necesarios. Esto supone una sangría económica para el Estado, que más allá de los 60 días desde la interposición de la denuncia está obligado a pagar los salarios de tramitación, esto es, aquéllos dejados de percibir por el trabajador desde la fecha del despido hasta la de notificación de la sentencia que califique por primera vez dicho despido, en el caso de que el trabajador opte por la indemnización, o hasta la readmisión, si es que opta por ésta.

La defensa no se presenta

Por otra parte, la rápida desaparición del teijdo empresarial en la Región de Murcia, a causa de la galopante crisis económica, está provocando que el empresario, en muchas ocasiones, ni siquiera se presente en el juicio para ejercer su derecho a la defensa. En estos casos suele tratarse de empresas en quiebra o simplemente ya desaparecidas. Por lo tanto, la mayoría de sentencias suelen ser favorables para el trabajador, pese a que si la defensa acreditara las razones económicas o productivas que llevan a la empresa a despedirlo, se trataría de un despido objetivo y no de uno improcedente.

Desde los sindicatos, por otro lado, se apunta también otro fenómeno en alza. Se trata de las denuncias interpuestas por los propios trabajadores para la extinción de su contrato laboral, cuando se da un incumplimiento grave de las obligaciones contractuales por parte del empresario. Pepe Soler, del servicio jurídico de UGT, señala que suelen ser trabajadores de empresas que no han llegado a cerrar formalmente. «Pasa el tiempo y al final dejan de pagar las nóminas y los seguros sociales, por lo que al trabajador no le queda otro remedio que exigir la extinción de su contrato».

Pulsa para ver más contenido para ti