Paso de gigante para construir viviendas municipales de jóvenes en Cartagena

A principios de año el Ayuntamiento de Cartagena hizo oficial su intención de comprar una seis parcelas en el barrio de Los Mateos, situadas tras la gasolinera, para la construcción de 40 viviendas destinadas a alquiler social y para su posible uso por parte de estudiantes. El presupuesto de la operación rondaba los 600.000 euros, un coste que finalmente se ha abaratado, ya que se ha descontado del precio final el coste del saneamiento ambiental de los terrenos, valorado en 200.000 euros, según han informado fuentes municipales tras la reunión que la Sociedad Municipal Casco Antiguo mantuvo ayer.

Aunque en este suelo no había actividad industrial, se ha demostrado que había acumulación de residuos que era necesario retirar antes de iniciar la construcción de las viviendas. Por este motivo, Casco Antiguo ha decidido que es preferible que el Ayuntamiento se haga cargo de esta actuación para que «se realice con todas las garantías».

Las parcelas, cuya compra se aprobó ayer, suman 2.341 metros cuadrados y cuentan con una edificabilidad de casi 3.300 metros cuadrados. La presidenta de Casco Antiguo, la vicealcaldesa en funciones, Ana Belén Castejón, recordó que el objetivo para afrontar esta compra «es optar a las ayudas del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Unión Europea, que contempla un programa de ayudas a la reconstrucción de viviendas y alquiler para colectivos vulnerables». Estas permiten obtener un máximo de 700 euros por metro cuadrado de superficie útil construida, con un máximo de 50.000 euros por piso.

Dudas para afrontar el gasto

«Así lograremos un doble objetivo, disponer de viviendas en alquiler que se pueden destinar a uso social y para estudiantes de la Universidad, y potenciar la rehabilitación del barrio de Los Mateos», explicó la edil. El objetivo del Gobierno, según aseguró en su día Castejón, es iniciar las obras «antes de que acabe esta legislatura para que estén a disposición del municipio antes de 2026».

Esta operación hizo saltar las alarmas en la oposición cuando se dio a conocer. Movimiento Ciudadano puso en duda la rentabilidad de la operación, ya que, según el partido, supondría dejar una «deuda millonaria al Consistorio».

La formación cartagenerista cifró el proyecto en 800.000 euros (ahora abaratado, según expone el Ayuntamiento), que sumado al precio que costará edificar las viviendas, ascendería a un total de unos cuatro millones de euros. «Un gasto doble» cuya financiación es una incógnita para MC y que su portavoz adjunto, Jesús Giménez Gallo, calificó de «nuevo pelotazo urbanístico».