Ante las críticas por las consecuencias del botellón en Cabo de Palos, la alcaldesa de Cartagena, Noelia Arroyo, ha afirmado que los botellones “como nos transmiten desde Policía Local y los distintos servicios que intervienen, es muy difícil acabar con ellos. Cuando se actúa en un punto, se consigue erradicar el botellón en ese punto, pero no desaparece, se desplaza a otro punto. Por lo tanto, es un fenómeno muy difícil de combatir. Los botellones es un fenómeno social que nos preocupa a todos los ayuntamientos en cualquier lugar de España”.

Arroyo subraya que “esto no es consuelo” y por ello “lo primero que queremos desde el equipo de Gobierno, y así lo manifestamos cada concejal que habla con los vecinos y con los responsables de los negocios que sufren las molestias de los botellones, es pedirles disculpas”.

“Ni los propios empresarios ni los vecinos merecen ser víctimas de esas conductas incívicas y de las molestias que pueden ocasionar que algunos establecimientos no cumplan las ordenanzas municipales. Y nuestra obligación es activar todos los mecanismos legales que tenemos a nuestro alcance para resolver la situación”, agrega la máxima responsable del Ayuntamiento cartagenero.

En este sentido, Noelia Arroyo a explicado que “desde la Concejalía de Seguridad Ciudadana, se viene reclamando el apoyo de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado permanentemente para intervenir en esos lugares. Por ello, tendremos que convocar una próxima junta de seguridad para analizar las consecuencias que ha tenido en este verano, que ha sido muy positivo porque ha habido muchos visitantes y mucha actividad económica, pero siempre tiene una cara buena y la otra cara de la moneda, que son esas molestias de la afluencia masiva de visitantes que incrementan la población en ese momento y que produce esas molestias”.

“Hemos echado en falta que haya dispositivos de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado de la envergadura como han tenido en Alcalá de Henares, con los efectivos que necesitan, porque hacen lo máximo con los efectivos de los que disponen, pero necesitamos más efectivos que puedan mantener un dispositivo a la altura de todos los cartageneros y quienes nos visitan en esas zonas turísticas. Por ellos apelo a que se refuercen esos dispositivos”, añadió la alcaldesa.

“Por otro lado, hemos mantenido conversaciones telefónicas hasta la fecha, tanto con el propietario del supermercado como los presidentes de las comunidades de vecinos de la zona, como los propietarios de determinados establecimientos, y sabemos que en unos días está pendiente una votación para nombrar a la nueva directiva de la asociación de vecinos de Cabo de Palos. Nos hemos comprometido con ellos para que ahora que finaliza el verano, sentarnos la semana que viene para analizar cuál ha sido la situación y ponernos ya mismos a trabajar en el próximo verano”, concluyó Arroyo.