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Patrimonio

Urbanismo da tres días a Correos para proteger la fachada de Telegrafía

La concejalía solicita a la entidad estatal, propietaria de la parcela de Cabo de Palos, que instale unas estructuras para conservar la portada, dañada durante la demolición de zonas no protegidas

Portada principal de la estación, dañada hace unas semanas. l.o.

Urbanismo ha solicitado a Correos que instale, en un plazo máximo de 72 horas, unas estructuras que protejan y garanticen la conservación de los elementos de la fachada de la antigua Estación de Telegrafía y Radio Costera de Cabo de Palos, declarados como bien inventariado y que han sufrido daños durante el proceso de demolición de los edificios no protegidos.

Los servicios técnicos municipales han realizado una inspección a las instalaciones y han constatado que las bases derechas que conforman su portada principal están fracturadas, tal y como denunciaron los vecinos a este diario.

En concreto, se ha corroborado que las bases de la derecha de estas estructuras están dañadas y que se ha producido un deslizamiento, por lo que se ha ordenado la instalación de unas estructuras que garanticen su conservación, mientras no se rehabilitan.

Estos elementos, al igual que otras piezas de la estación, como la nave principal, la casa de máquinas y un aljibe ubicado en la parcela, están protegidos por la declaración de 30 de octubre de 2019 de bien inventariado de la Dirección General de Patrimonio Cultural.

Por su parte, Correos ha asegurado a esta redacción que "no ha recibido hasta el momento ninguna notificación al respecto". En cualquier caso, según han destacado "tanto en el proyecto presentado por Correos como en el otorgamiento de la licencia se incluye la relación de elementos protegidos" y la Sociedad Estatal "realizará todas las actuaciones que se les solicite para su mantenimiento".

Correos inició en febrero de 2021 un proceso contencioso-administrativo con el objetivo de que todas las edificaciones dejen de ser bien inventariado. Ante ello, los vecinos, que presentaron más de 1.200 firmas para frenar la demolición, han solicitado presentarse como parte contraria en el recurso.

«Por muy sorprendente que pueda parecer una Sociedad Estatal recurre la clasificación de bienes inventariados. Todo ello con el único objetivo de poder obtener un rendimiento económico con la venta de una parcela que la entidad obtuvo de forma gratuita por una concesión, según nos han comunicado herederos de los titulares que cedieron estos terreno», denuncian.

«Desconocemos si el tribunal va a admitir nuestra personalicen, pero solo así podremos al menos estar en disposición de intentar ayudar a la Dirección General de Bienes Culturales en la defensa de la clasificación y de los intereses generales», concluyen en su petición.

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