Dos terceras partes del Centro Comercial Las Dunas han sido clausuradas por riesgo de derrumbamiento por problemas estructurales. Tanto en la planta baja con en la alta, los propietarios del centro han colocado grandes vallas de chapa para que no se pueda acceder a los establecimientos situados en zona peligrosa, muchos de ellos bares que han tenido que recoger sus terrazas y bajar la persiana, ni a las zonas más abandonadas del Centro Comercial en la que los jóvenes se colaban para hacer botellón.

"El 80% del Centro Comercial está clausurado", explica el concejal de Seguridad Ciudadana, Juan Pedro Torralba, que realizó una inspección esta semana junto a los técnicos de Urbanismo y vieron que el local no era seguro. La única zona fuera de peligro y que no ha sido clausurada es la planta baja cuya zona de acceso está más próxima a la calle Ronda de Levante. Fuentes municipales informan de que las obras para solucionar estos problemas ya han comenzado, se ha reforzado la estructura del sótano con puntales y que en unos tres meses podría estar terminado.

Uno de los locales afectados es el de la Asociación de la Mujeres Virgen del Mar de Cabo de Palos, ubicado en la segunda planta de Las Dunas, y que ha sido precintado. "Lo han cerrado porque la estructura de abajo se hunde. Es una anomalía del hierro de abajo de los sótanos y por problemas de forjado de suelos. Hasta que no terminen las obras no podremos volver a la asociación", indica la presidenta de esta, Isabel Belmonte.

Después de que Urbanismo realizara dos inspecciones, avisó de los problemas estructurales existentes a los propietarios de Las Dunas, que actualmente están haciendo un proyecto de reparcelación. Según informan fuentes municipales, los dueños decidieron clausurarlo por precaución, ya que, legal o ilegalmente, son muchas las personas que hacen uso de este lugar. El Centro Comercial Las Dunas lleva años abandonado y en las zonas más ruinosas, como las zonas interiores y el sótano, los jóvenes se reúnen para hacer botelleo.

Los propietarios, que tuvieron un plazo de quince días, han colado grandes vallas de chapa dura para dificultar el acceso. Mientras tanto, el Ayuntamiento de Cartagena proporcionó durante toda la semana pasada vallas provisionales y Policía Local está vigilante de no dejar entrar.

Sanciones a los locales por no tener licencia

A su vez, esta semana un local ha sido clausurado y cuatro sancionados por vender alcohol o no ajustarse a sus licencias de actividad el pasado sábado noche en Las Dunas. "La inmensa mayoría de los hosteleros y comerciantes de Cabo de Palos cumplen con la normativa, y son los primeros interesados en que todo el mundo se ajuste a esta, es solo una minoría la que se la salta", afirma la vicealcaldesa y concejal de Urbanismo, Ana Belen Castejón.

Por ello, muchos vecinos de Cabo de Palos creían que el cierre de las terrazas y los bares de Las Dunas era una medida para frenar las aglomeraciones y botellones que se dan cada fin de semana allí.