Cartagena prepara su candidatura para optar a convertirse en Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco. Este miércoles la Comisión Mixta de Seguimiento se reunió en el Palacio Consistorial con la intención de determinar cuál será la estrategia que seguirá el Ayuntamiento para conseguir la declaración por parte de la Unesco.

Finalmente, la comisión, encabezada por la alcaldesa de Cartagena y responsable del Área de Patrimonio del Consistorio cartagenero, Ana Belén Castejón, ha decidido centrar su candidatura en el patrimonio defensivo que posee la ciudad portuaria.

Aunque lo más obvio hubiera sido orientar la propuesta hacia el patrimonio romano que aglutina Cartagena, el Ayuntamiento ha decidido apostar por el defensivo ya que «Cartagena es una plaza fuerte desde la antigüedad», apunta Castejón. «Desde nuestra caracterización geográfica por nuestro puerto inexpugnable, hasta la caracterización paisajística, comercial, industrial, arqueológica y claramente militar, todo está vinculado a nuestra singularidad como plaza fuerte y defensiva», sostiene.

Además, el proyecto de Cartagena Patrimonio de la Humanidad optará a la convocatoria de los fondos del proyecto europeo anticrisis, denominados Next Generation, a través de los fondos Next CARM, informan desde el Ayuntamiento. Castejón señala que precisamente por este motivo «ahora más que nunca tenemos que trabajar con ahínco y tesón para lograr que Cartagena se sume al privilegiado grupo de lugares reconocidos por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad».

No se trata únicamente de un reconocimiento a la historia y la cultura de la ciudad portuaria, sino que, según la alcaldesa, la declaración de la Unesco podría ser un aliciente para los posibles inversores que puedan llegar a Cartagena durante los próximos meses y que serían muy necesarios «ante la enorme crisis sanitaria, social y económica que estamos viviendo», insiste la regidora de la corporación municipal.

Tras el visto bueno de la comisión, el Ayuntamiento ha iniciado la tramitación de la documentación previa al Consejo Nacional de Patrimonio Histórico, que será el paso previo a la redacción del expediente de la candidatura de Cartagena.

La posición privilegiada de Cartagena y de su puerto en el eje del Mediterráneo ha provocado que desde su nacimiento en el año 227 antes de Cristo, la ciudad siempre haya estado ´amurallada´, con la intención de protegerla de posibles ataques externos.

Es por eso que la arquitectura defensiva siempre ha estado presente, aunque ha evolucionado a lo largo de los siglos de la mano de las civilizaciones que han pasado por Cartagena. La ciudad cuenta con un total de cinco castillos, dos torres defensivas y 21 baterías que, como apuntan desde la Asociación de Fortalezas y Castillos de Cartagena (Aforca) «muy pocas ciudades conservan».