Las grandes celebraciones de Cartagena también están sujetas a la normativa sobre ruidos del municipio. Por eso, la Junta de Cofradías de Semana Santa ha decidido encargar un informe sobre la repercusión acústica que tienen las procesiones durante su paso por las calles de la ciudad.
El presidente de la Junta y Hermano Mayor Marrajo, Francisco Pagán, explicaba que, por indicación del Ayuntamiento, van a preparar un informe sobre la repercusión acústica de las procesiones por el ruido de tambores, bandas de música y «todo lo que supone poner una procesión en la calle». Según el resultado del informe, su contenido será compartido con el Gobierno municipal para que, a través de la Junta de Gobierno se haga la excepción que contempla la normativa y que se puedan superar los límites acústicos legalmente establecidos.
Esta iniciativa se pone en marcha ante el temor de que los vecinos puedan poner una denuncia amparándose en la normativa, como ha sucedido con las campanas de la Iglesia del Carmen.
El presidente de la Junta añadió que «es una medida de prevención. La Semana Santa debe ir acorde con los tiempos y con la ley», por lo que prefieren adelantarse y cumplir con la misma.
Concejalía de Medio Ambiente
La concejala de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Cartagena, Cristina Mora, explicó que no hay que temer denuncias por parte de vecinos, «ya que los principales eventos que se vienen desarrollando en Cartagena, cuando hay una elevación de los niveles tradicionales de ruido, tienen que estar sujetos a una suspensión de los criterios de calidad acústica».
El Ayuntamiento, según Mora, «vela por unas medidas correctoras para que haya una conciliación entre el ocio y el descanso». Mora recordó que en estos momentos se está tramitando una nueva ordenanza de ruidos. El 21 de enero se publicó en el BORM el borrador, por la tanto, ya está abierto el plazo de alegaciones, que durará dos meses, «porque desde el Ayuntamiento se quiere contar con todos los sectores implicados. En la redacción de la misma -remarcó la concejala- se ha contado con el criterio de la UPCT».
