Aumentar los recursos y medios técnicos para reforzar la atención, fomentar acuerdos de colaboración con los responsables del ámbito sanitario, reforzar la oferta de ocio y tiempo libre para las personas en situación de exclusión residencial, consolidar la relación del Consistorio con las distintas entidades colaboradoras y avanzar en el conocimiento y detección de personas sin hogar o transeúntes. Son las líneas de actuación que potenciará de cara al próximo año el Ayuntamiento en la atención a personas sin hogar, tal y como quedó fijado en la comisión municipal celebrada ayer para abordar este asunto.

Y es que, tal y como explicó la concejala de Servicios Sociales, Mercedes García, desde el inicio de esta legislatura se ha reestructurado el servicio para dar prioridad a transeúntes y a las personas que se encuentran en situación de exclusión. «La prioridad de este Ayuntamiento y la razón de ser de esta comisión es precisamente atender a los ciudadanos que se hallan en situaciones como estas y buscar medidas para luchas contra las causas que las producen», señaló García.

En la memoria de los servicios prestados durante este año destacan actuaciones como la campaña para la ola de frío, las diferentes acciones llevadas a cabo en el Monte Sacro, así como la atención diaria y personalizada ofreciendo recursos y medios en colaboración con entidades sociales.

Según los datos aportados en la memoria, las oficinas de atención a personas sin hogar y transeúntes atendieron a 567 personas diferentes el año pasado, siendo 486 varones y 81 mujeres, de edades comprendidas entre los 18 y los 82 años y de 39 nacionalidades diferentes. En su mayoría, fueron españoles, 328 personas, seguidas de 83 marroquíes, 24 rumanos y 13 polacos, entre otros.

Más pernoctaciones

Asimismo, en 2017 se realizaron 1.328 atenciones personalizadas a personas que una o varias veces han solicitado información o recursos en dependencias municipales. Este dato, según el informe, supone «una reducción importante» si se compara con las atenciones prestadas en 2016, que fueron 2.117.

Lo más solicitado fue la demanda de albergue, pasando de 3.573 estancias en 2016 a 4.317 el pasado año, repartidas entre la Hospitalidad Santa Teresa, los pisos de acogida de ACCEM y los centros de Cáritas y Torre Nazaret.

Sobre el perfil del usuario del servicio, se trata en un 86% de hombres nacionales, solteros, sin hijos y de edad entre los 35 y 55 años.