La Jara de Cartagena ya es una especie en situación crítica, cuyo futuro está en peligro de extinción, según la orden del Ministerio para la Transición Ecológica que publica en el Boletín Oficial del Estado (BOE). Así, según lo previsto, será sometida a obras y otros proyectos de recuperación y conservación que tendrán la consideración de interés general y su tramitación será urgente.

En concreto, para revertir esta situación crítica, según la orden ministerial publicada, se constituirá un grupo de trabajo para desarrollar actuaciones destinadas a reducir el riesgo de extinción de esta especie en situación crítica. Estará formado por un representante del Ministerio para la Transición Ecológica, otro de la Generalidad Valenciana y otro de Región de Murcia y estará adscrito a la Comisión Estatal para el Patrimonio Natural y la Biodiversidad, así como al Comité de Flora y Fauna Silvestres. Y es que, la Región y la Comunidad Valenciana son los únicos puntos en Europa con esta planta, autóctona de Cartagena.

Además, este grupo podrá integrar también a expertos, entidades científicas y otras organizaciones que se estime que puedan participar como asesores, si cuentan con experiencia contrastada en la conservación de esta especie.

De esta forma, pese a que el grado de peligro sobre la Jara de Cartagena se ha incrementado, desde la Universidad Politécnica (UPCT), la profesora María José Vicente define la inclusión de la especie en situación crítica como «una buena noticia», en cuanto supondrá más control y recursos para mantenerla viva. Y es que, desde la Universidad llevan años trabajando en coordinación con la Comunidad Autónoma, a través de la Dirección General de Medio Natural, para conseguir la supervivencia de la Jara.

En este sentido, Vicente destaca que ahora el Estado dará prioridad a las actuaciones encaminadas a la conservación de la especie, y podrá movilizar dinero para llevar a cabo diversos proyectos. De hecho, ya se anunció una subvención de 82.000 euros, más unos 20.000 de la Comunidad, para trabajar en proyectos.

Desde la Dirección General también destacan que la catalogación como especie en situación crítica llama la atención sobre que «si no actuamos pronto, acabará desapareciendo». Por ello, afirman, ahora pasa a ser de interés general para el Estado y los planes pasan a ser urgentes, por lo que sus plazos administrativos se reducen casi a la mitad.

Asimismo, desde el departamento autonómico también destacan la creación de grupos de trabajo y comités científicos para desarrollar los proyectos futuros. Y es que, en el caso de la Jara de Cartagena el objetivo no es sólo plantar más ejemplares, sino que se valgan por sí solos para seguir existiendo, lo que lleva a los equipos de trabajo a gestionar incluso la genética de la especie para conseguir los objetivos.

El plan está trazado y parece que funciona. Hace medio año se plantaron unos 300 ejemplares en la localidad de El Llano del Beal, auténtico hábitat de la especie, y tras el verano han sobrevivido más del 75%, cuando lo habitual era lo contrario, un 25%. Ahora, se confía en que los resultados puedan ser aún más satisfactorios.