Un recuerdo multitudinario

Cerca de 60.000 cartageneros, según la estimación de fuentes municipales, acudieron ayer a los cementerios municipales y parroquiales para visitar a los seres queridos que ya no están, como es tradición en el día de Todos los Santos.

Y es que, los camposantos acogieron a numerosas personas que llevaron las acostumbradas flores -en menor número que otros años debido a la crisis, según los custodios de los cementerios municipales- para depositarlas junto a las sepulturas de sus familiares.

Desde primera hora de la mañana, hasta 36 agentes de la Policía Local trabajaron para garantizar la seguridad y velar por la regulación del tráfico, que volvió a ser intenso en la entrada y salida de los camposantos, pese a que la empresa concesionaria del transporte urbano, Alsa, reforzó su servicio de la Línea 5, que une los cementerios de Santa Lucía y San Antón, manteniendo su servicio como en un día laborable por la mañana, con una frecuencia de 15 minutos.

Como es ya tradición, una representación de la corporación municipal visitó los cementerios de Nuestra Señora de Los Remedios, en Santa Lucía, y San Antonio Abad, en el barrio de San Antón. De esta forma, los concejales Nicolás Ángel Bernal, Antonio Calderón, Diego Ortega e Isaías Camarzana, acudieron a la misa celebrada en el camposanto de Santa Lucía, depositando al término de la eucaristía una corona de flores en la explanada frente a la iglesia en recuerdo a los cartageneros fallecidos.

Las visitas a los tres cementerios de la ciudad, así como a los once parroquiales, se produjeron de forma escalonada, por lo que no hubo momento alguno de aglomeración.