Los más jóvenes de la Cofradía California volvieron a demostrar ayer, como cada año, que la Semana Santa de Cartagena tiene ´cuerda para rato´. La procesión de la Entrada de Jesús en Jerusalén, conocida popularmente como la de ´La Burrica´, recorrió ayer la ciudad con esa alegría y colorido tan característicos de un cortejo que nada tiene que envidiar a los grandes desfiles de la semana pasionaria.

La climatología acompañó a los jóvenes cofrades durante toda la tarde, desde la salida del cortejo, a las cinco, hasta su recogida, sobre las nueve de la noche, en Santa María. Pese a las escasas novedades que incluyen las procesiones este año, la Samaritana cumplía ayer su cincuenta aniversario desfilando en Domingo de Ramos. El Cristo que la acompaña en el trono lució una corona diseñada por el orfebre lorquino de la Casa Real.

Unos dos mil niños participaron en la procesión que contó con numerosos espectadores a lo largo de todo su recorrido.