La costa murciana, y en especial la de Cartagena, se ha convertido en uno de los destinos ‘preferidos’ para los inmigrantes que llegan en patera. Al menos, desde Nochevieja hasta ahora, ya son más de ochenta los extranjeros que han sido interceptados en hasta nueva pateras que trataban de llegar al litoral del municipio.

Así, la costa cartagenera es la tercera que más inmigrantes ha recibido en lo que va de año, tan sólo por detrás de la de Almería, a la que ya han llegado 212 extranjeros, y por delante incluso de las de Canarias, en las que han desembarcado 71.

En el caso de Cartagena, las dos últimas pateras llegaron ayer, ambas localizadas frente al litoral de Cabo de Palos. La primera de ellas llegó remolcada al puerto de Cartagena poco antes de las diez de la mañana. Sus trece ocupantes habían pasado tres días a la deriva en alta mar y cuatro de ellos tuvieron que ser atendidos por un médico y un enfermero del equipo de Cruz Roja, ya que presentaban síntomas de hipotermia.

No obstante, no tuvieron que ser trasladados al hospital.

Sí que fueron llevado a Urgencias del Rosell dos de los diez ocupantes de una segunda patera que llegó al puerto de Cartagena a primera hora de la tarde y entre los que también se encontraba un menor.

Estas dos pateras se suman a la que llegó ayer con otros nueve inmigrantes, así como a las que arribaron a la costa a principios de año con más de casi cincuenta extranjeros.

La instalación del Sistema Exterior de Vigilancia Integrado (Sive) ha servido para localizar a estas embarcaciones antes de que lleguen a tierra, con el fin de interceptarlas y remolcarlas bajo vigilancia hasta puerto. Sin embargo, no parece haber frenado las oleadas de pateras que se producen especialmente cuando hay buena mar.