El pasado viernes 16 de septiembre dieron el pistoletazo de salida las Fiestas de Carthagineses y Romanos 2022: con un programa que finaliza este domingo 25 y con la mayor inversión de su historia (655.000 euros de presupuesto), las celebraciones han irrumpido en una ciudad ávida de festejos.

Pero, por mucha expectación que hayan generado las fiestas de "El año del resurgimiento" tras la pandemia, no todos los visitantes se han ido con buen sabor de boca: el pasado 22 de septiembre, Rosa Manrubia (abogada, diputada del Colegio de Abogados de Cartagena y secretaria en AMEP Cartagena) se hacia eco a través de Twitter de los precios del campamento: el recinto de las fiestas donde se han instalado las "carpas" de más de 50 grupos.

El campamento de Carthagineses y Romanos tiene parcelas ambientadas por las tropas de ambos grupos, son de acceso libre y en ellas se ofrece desde bebida hasta cenas. Los precios son iguales para festeros y no festeros, pero aunque este año se ha tratado de mantener los precios pese a la inflación y la subida del IPC, no todos los comensales han quedado satisfechos.

En su publicación, Rosa Manrubia denuncia que pagó "58 euros por cenar en Carthagineses y Romanos. 1 ración de croquetas, 1 de longaniza y 1 de lomo. 1 cocacola, 1 de agua y 1 clara", por lo que concluye que no volverá a concurrir al campamento a cenar: "Va a volver a cenar a las fiestas Rita. Os estáis cargando las fiestas", denuncia.

Otros usuarios se han sumado a la protesta a través de los comentarios de la publicación: otro tuitero añade a la queja la ausencia de lista de precios o el mal trato que recibió cuando trató de ir al baño para pincharse insulina: "64 euros me cobraron a mí en ese mismo sitio por tres raciones y 4 bebidas. Sin lista de precios. Además del trato, que fue bochornoso. Y ni qué decir los jefecillos de la tropa que ni tan siquiera me dejaron ponerme la insulina... fue denigrante".

Por otro lado, hay internautas que demandan el ticket para que "veamos la burrada de precios de cada cosa" o que denuncian que "las fiestas están hechas para la gente de las tropas y legiones. Nunca han sabido enfocarlas al resto del público, y no creo que sea tan difícil".