Kiara Moore, una niña de tan sólo dos años ha fallecido en el Hospital Universitario de Gales tras ser rescatada en el río Teifi. La pequeña se quedó un momento sola dentro del vehículo mientras su madre acudía a su oficina a coger dinero. Al volver, la mujer vio que el coche y su hija habían desaparecido así que pensó que se trataba de un secuestro. No obstante, horas después, el coche apareció sumergido en el río Teifi, en Cardigan, que hay delante de la oficina con Kiara en su interior.

Tras descubrir que la pequeña había desaparecido, sus progenitores acudieron a denunciar el robo del vehículo e hicieron un llamamiento para encontrar a su hija, pero no ha sido hasta este lunes cuando las autoridades han dado con ella. La pequeña Kiara se encontraba todavía dentro del coche, y aunque aún estaba con vida, su estado era muy grave y falleció a las pocas horas.

La policía confirmó la triste noticia a través de su cuenta de Twitter y el padre de Kiara quiso expresar su agradecimiento a los oficiales que se sumergieron en el río para tratar de salvar a la pequeña.

Jet Moore, el padre de la niña, ha confirmado que el coche se estrelló contra el río justo en frente del lugar donde tienen su oficina de actividades al aire libre.

El hombre explicó en Facebook que su mujer y su hija subieron al vehículo para volver a casa, pero al sentarse rompió su tarjeta de crédito. Entonces bajó rápidamente a la oficina a coger dinero y al regresar al coche, ya no estaba. Miró al río y no había nada, así que pensó que la niña había sido secuestrada, tal como explican Daily Mail y la BBC.

La madre, Kim Rowland, se culpa ahora de lo ocurrido: "Tristemente mi hermosa niña ha fallecido debido a mi propia estupidez. Tendré que vivir con la culpa de esto el resto de mi vida", decía Rowlands.