Desde el pasado domingo por la mañana, muchísima tinta ha corrido para explicar lo sucedido en el circuito de Sepang en la penúltima carrera del campeonato del mundo de Moto GP, y lo que queda por contar hasta que se decida el mundial en Valencia dentro de semana y media. Otro ejemplo más de lo que el ser humano es capaz de sentir, de pensar y de hacer, según esté en un ´lado´ o en otro. Y es que la perspectiva cambia según lo mires con sangre italiana, española, de motero, de espectador, de fan, de neutral, de rossista, de lorencista, etc.

La inteligencia emocional te dota de cierta perspectiva en estos casos; sin alardeos de razones, ni forofismos€ simplemente te hace detener y observar cómo cada cual ve la misma situación de distinta manera; tan lógico como que es así. ¿Cuántas veces habrán pasado las imágenes de la caída de Márquez? Unos lo tienen clarísimo desde el primer momento que ocurrió, otros escuchan la opinión de expertos para dar la suya propia, unos culpan del hecho a Rossi porque calentó al piloto español en sus declaraciones previas, otros a Márquez porque podía ir más rápido y se quedó a entorpecer€ y así sucesivamente; incluso algunos dicen que es bueno que haya sucedido porque así se habla de motos.

Y la pregunta clave es, ¿quién lleva razón en todo esto? Cada uno tiene su propio pensamiento, cada uno tiene su propia opinión, cada uno lo ve como lo siente, cada uno lo ve como lo quiere ver€ y así es siempre, cada persona ve su propia vida de muy distinta manera a como la podemos ver los demás. Esta afirmación que hago aquí nos puede hacer comprender, en cierta manera, que si tus sentimientos, pensamientos, emociones y acciones son propios€ tus razones irán a la par. Desde mi punto de vista; tanto Rossi como Márquez se meten en un charco que viene enfangado desde hace tiempo, haciéndole un flaco favor al deporte en general, donde de ninguna manera fomentan valores ni ejemplo para nadie.

No es que se trate de que ´yo tengo la razón´, se trata de que ´cada uno lleva la suya´.