La alcaldesa de Cartagena, Ana Belén Castejón, ha destituido a su vicealcalde y concejal en materia de urbanismo, José López, aduciendo que el pacto de legislatura recogía la posibilidad de introducir cambios en el equipo de gobierno si se producía una situación excepcional. José López está siendo investigado por cuatro delitos en relación con la compra de un inmueble durante su periodo al frente del consistorio cartagenero. El ciudadano poco avisado puede pensar que la cuádruple investigación constituye dicha situación excepcional. Pero no.

Ser investigado durante un proceso de instrucción no implica culpabilidad. Son numerosas las instrucciones que acaban en sobreseimiento. La investigación no hace a José López indigno de representar a los cartageneros.

Pero esa es mi opinión, no la del PSOE murciano. El PSOE murciano se apresuró a exigir la dimisión de Pedro Antonio Sánchez por ser investigado. Tovar manifestó que estar bajo sospecha por graves delitos de corrupción era motivo suficiente para entregar el acta de diputado. Según el dirigente socialista, acudir a declarar ante un juez convertía a PAS en «indigno de representar a la Región».

Para Castejón, sin embargo, estar bajo sospecha de prevaricación, malversación de fondos públicos, tráfico de influencias y negociación o actividad prohibida no es motivo suficiente para no ser vicealcalde y concejal de Cartagena.

Castejón pegó el puñetazo en la mesa por los comentarios de López acerca de que el PSOE andaba en apaños con la compañía del agua, apaños que se desarrollaban en la marisquería propiedad de un destacado miembro socialista. Esos comentarios, y no la múltiple investigación, incapacitaban a López para continuar en el equipo de gobierno local. La cuádruple investigación tiene un pase; las insidias sobre el grupo municipal socialista, no. Esa parece ser la ´doctrina Castejón´. Y parece una doctrina coherente: respetuosa con la presunción de inocencia e implacable con el respeto debido entre formaciones políticas. El problema es que es lo contrario de lo que el propio PSOE murciano afirma. Así como Castejón ha destituido a López, quien quiera que se alce como sustituto de González Tovar debería destituir a Castejón por su nulo compromiso con el ideario anticorrupción del partido.

López considera que Castejón ha incumplido el pacto. Sin embargo, su formación, MC, continuará en el equipo de gobierno. Su célebre chulería ha llegado hasta donde llegó la posibilidad de perder los cargos.

Los cargos, como el marisco, es cosa que gusta mucho.