Mucho cuidado, no se dejen confundir, y menos abducir, pues las circunstancias son propicias para ello. Una cosa es la correlación entre acciones y efectos y muy otra la causalidad de esos efectos. Incluso es posible que en no pocos sucesos el fenómeno de la correlación tuviera más que ver con la casualidad que con la causalidad. Mis respetos van más del lado de los pronunciamientos científicos que por las estadísticas de los fenómenos médicos. Así, si mi amigo el presidente de Homeopatía Mundial mantiene que las salchichas y las morcillas son puro veneno, esto para mí es más interesante que dar crédito a ese ´misil´ tan canalla que identifica al consumo de carnes como proveedoras malignas del criminal cáncer. ¿Habrá, a este paso, algo bueno que no sea malo para la salud?