Tuve hace unos días una conversación, en que uno de los tertulianos decía con fuerza y convicción que las personas hemos de tener un proyecto de vida en toda su amplitud, personal, familiar, laboral€ que deberíamos responder qué queremos en la vida y cuál es nuestra meta. Creo que lleva mucha razón, porque cuando no le damos sentido a nuestra vida, no le damos contenido a ese proyecto, somos veletas, que nos llevan a donde quieren, que nos creemos todo lo que dicen. Me sigue llamando la atención esa afirmación de certificado de veracidad cuando se dice «lo ha dicho la tele». Hay que darle sentido a nuestra existencia dotándola de un proyecto vital y vitalista.