«Estuvimos trabajando con el protocolo de acoso un mes y una semana. No tuvimos tiempo de profundizar ni de finalizar el protocolo porque Lucía se trasladó de nuestro centro».

Es lo que se lee en un informe del IES Ingeniero de la Cierva, con fecha 16 de enero y firmado por la jefa de estudios adjunta y la orientadora de este centro educativo.

Se trata del instituto -en la pedanía murciana de Patiño- en el que cursaba sus estudios la niña de 13 años de edad que la semana pasada se quitaba la vida en su casa de Aljucer tras años de bullying.

En el documento, al que ha tenido acceso LA OPINIÓN, se destaca que en el IES «los alumnos ven la película Cobardes como medida preventiva del acoso».

Cobardes es una cinta española del año 2008, dirigida por José Corbacho y Juan Cruz, que narra la historia de Gabriel, un niño al que en el colegio le decían 'zanahoria' porque es pelirrojo.

En otro momento del informe se indica que los grupos de alumnos se hacen en función de las asignaturas que eligen ellos. «Si Lucía no hubiera escogido Creación Musical y hubiera escogido Francés o Iniciación a la Investigación, le hubiera correspondido el grupo A, que tenía alumnos con mejor rendimiento», argumenta el instituto.

El IES relata que, cuando los padres de la niña pusieron en conocimiento que estaba sufriendo bullying, y se entrevistaron con ella, la menor contó que dos compañeros la llamaban «gorda, fea, loca y lechosa».

El centro insiste en que llamaron a los dos presuntos acosadores y ambos reconocieron los hechos. Uno de ellos «lo reconoce al instante», aunque el otro primero «dice que él no ha dicho nada, que sólo ha sido el otro». «Y, cuando le advertimos de que estamos seguros de que Lucía no miente, se pone a llorar y lo admite», detallan desde el IES.

Después se llamó a las familias de los dos acosadores confesos. Al padre del principal «le explicamos la situación, que Lucía lo está pasando mal, que hemos activado el protocolo de acoso y se advierte que, si la situación no cesa de raíz, abriríamos expediente disciplinario y lo enviaríamos a la Fiscalía de Menores», subraya el IES.

Teatro contra el bullying

«Hay que reseñar que el niño dice: 'Quiero pedirle perdón, porque me arrepiento y quiero que sea feliz y no me tenga miedo, lo siento'», se lee en el documento. Se le expulsó cinco días. Este menor, precisa el centro, «es un alumno de integración con discapacidad ligera. Ha sido criado por los tíos, porque los padres tenían retirada la custodia, aunque ahora, después de salir de la cárcel, la ha recuperado el padre, por lo que tiene una situación familiar totalmente desfavorable».

«Se le ha expulsado del instituto en varias ocasiones», reconocen desde el centro de Patiño.

En cuanto al segundo acosador confeso, «la reunión con sus padres es muy tensa, pues no entienden que hayamos abierto un protocolo de acoso por haber insultado alguna vez a Lucía». Este niño, por su parte, «no para de llorar, diciendo que no lo va a hacer más». Se le expulsa un día.

Desde el IES detallan que a Lucía se le propuso participar «en el guión de una obra de teatro sobre el acoso escolar», con el fin de «crear un ambiente donde Lucía pudiera expresar sus sentimientos y aprender a defenderse».

No obstante, «la obra de teatro no se llegó a representar porque Lucía se cambió a otro instituto».

Cuando los padres insistieron en el cambio de centro, y pidieron un informe a este IES para que la trasladen, la jefa de estudios dijo «que a su hija se la ve bien en el instituto, que ya nos conoce, que el próximo curso iba a estar en un grupo donde pudiera sentirse más cómoda, tal y como habíamos hablado en reuniones anteriores». «Le informamos (al padre) de que desde el centro no podemos emitir ningún informe, que el procedimiento que hay que seguir es acudir a la Consejería y que desde la misma debían pedírnoslo a nosotros», reza el texto. Agrega que se hace así «por protocolo».

«Cuando desde la Consejería nos informaron de la solicitud de cambio de centro de manera inmediata, nos sorprendió mucho, porque pensábamos que el cambio de centro del que se había hablado era para el próximo curso y estábamos a 27 de mayo. Dimos nuestra aprobación, pues así lo quería la familia», apunta el documento del IES.