La Audiencia Provincial ha desestimado el recurso de un hombre contra la sentencia que absolvió a su exmujer, a la que acusó de haberse apoderado de dos sillitas de transporte de niños que estaban en su coche.

El juzgado declaró probado que el 28 de diciembre de 2014 la acusada, «sin que conste ningún tipo de forzamiento», entró al coche que venía utilizando su exmarido y que estaba aparcado en una calle de la pedanía murciana de Corvera. Según la sentencia, «no se ha acreditado que el vehículo no perteneciera a la acusada», al igual que tampoco se ha demostrado que fuera la causante de daños por valor de 520 euros en el coche.