El Tribunal Superior de Justicia de la Región ha desestimado el recurso de una mutua contra la sentencia de un juzgado que declaró como laboral el accidente de tráfico sufrido por un empleado de Correos que había pedido permiso para salir antes para poder atender a su esposa enferma. El juzgado rechazó en primera instancia el recurso de la mutua y confirmó la resolución del Instituto Nacional de la Seguridad Social que declaró la baja como accidente laboral, al haberse producido el atropello cuando regresaba a su domicilio tras recibir la llamada de su mujer anunciándole que se encontraba mal.