Más de 300 personas se acercaron ayer al Parque Regional El Valle-Carrascoy para plantar nuevos árboles en el marco del programa 'Bosques para la Salud' de la Unidad de Salud Medioambiental Pediátrica del Hospital Virgen de la Arrixaca. Padres, madres, niños e, incluso, recién nacidos sembraron semillas de pino y se comprometieron a visitar la zona periódicamente para asegurarse de la evolución de estas plantas, con las que han contraído una vinculación afectiva.

La consejera de Agua, Agricultura y Medio Ambiente, Adela Martínez-Cachá, destacó la importancia de esta actividad, ya que «permite establecer vínculos entre las personas y los bosques». Se trata de espacios, añadió, que «debemos cuidar y potenciar, no sólo porque son el hábitat de numerosas especies, sino porque cumplen un papel esencial en el control de la erosión y la captación de agua, son sumideros de carbono, garantizan una alta calidad del aire, y también son una fuente de alimentos sanos».

El programa es fruto del acuerdo entre las consejerías de Agua y Sanidad para el desarrollo de acciones innovadoras en materia de salud y medio ambiente.