Francisco Peñalver Motas, uno de los imputados en el caso Barraca, sobre supuesta corrupción urbanística, ha negado que el estudio de arquitectos de su familia abonara pagos encubiertos a su hermano Joaquín, igualmente encausado en estas diligencias, cuando este era jefe de Planeamiento del ayuntamiento de Murcia. Peñalver Motas hizo estas manifestaciones al declarar en el Juzgado de Instrucción que investiga los hechos, que trata de aclarar si el que fuera jefe de Planeamiento se aprovechó de ese puesto para dirigir a los promotores urbanísticos al despacho de arquitectos creado por su padre. Durante su declaración, admitió que Joaquín Peñalver realizó trabajos para ese gabinete, pero, en su opinión, no resultaban incompatibles con su puesto por tratarse de asesoría y no de cuestiones de planeamiento urbanístico.