Las Universidades Públicas de la Región sufrirán un recorte en los presupuestos asignados a ellas para este año y que fueron aprobados en diciembre por la Asamblea Regional. Según fuentes universitarias, la Universidad de Murcia y la Universidad Politécnica de Cartagena están a la espera de una comunicación oficial en la que la Comunidad Autónoma les detallará la reducción de su asignación y que podría llegar en los próximos días, añadiendo un problema más a las ya débiles tesorerías de las instituciones académicas.

El rector de la Universidad de Murcia, José Antonio Cobacho, solo pudo confirmar ayer a LA OPINIÓN que están a la espera de la comunicación y que ya saben que el presupuesto se recortará, pero aún no han sido informados de cuál será la cuantía ni en qué capítulos. «No sabemos nada concreto todavía, pero sí que esperamos saber algo más en los próximos», aseguró el rector, que no entró a valorar la decisión de la Comunidad «porque estamos en la situación que estamos», pero que, como es lógico, está preocupado. Esta redacción también confirmó que Félix Faura, rector de la Universidad Politécnica, está igualmente a la espera de las noticias de un recorte que no esperaban hace unas semanas.

Sus tesorerías están muy castigadas porque no reciben ningún pago de la Comunidad Autónoma desde el mes de junio, salvo el que se hace para pagar las nóminas de los trabajadores. Esto ha provocado que la UMU haya dejado de recibir en estos meses más de cincuenta millones de euros y más de veinte en el caso de la Universidad Politécnica. Por el momento ambas instituciones están haciendo frente a sus pagos a proveedores y a los gastos corrientes y están reduciendo en otras áreas de gestión interna para poder aguantar el tirón. La consejería de Universidades, que dirige Salvador Marín, lleva meses insistiendo en el hecho de que estos problemas se deben a la falta de liquidez que padece la Comunidad por la negativa del Gobierno central de permitir el endeudamiento, pero que recibirán su dinero cuando la situación cambie. Hasta ahora ambos rectores han mantenido la lealtad institucional, conscientes de la situación, pero no han dejado de alertar de la difícil situación en la que se encuentran. El principal problema del recorte de presupuestos que se prepara ahora es que las universidades contaban desde hace tres meses con un dinero que seguro que ya no cobrarán. La Asamblea Regional aprobó un presupuesto de 214 millones de euros para las universidades. Esta redacción se puso en contacto con fuentes de la Consejería de Universidades, que no hicieron ninguna declaración.