Una mujer de 25 años fue detenida el pasado viernes en la pedanía murciana de Aljucer tras arrojar sobre su marido una olla de agua hirviendo durante una discusión. El hombre, de 33 años, sufrió diversas quemaduras en rostro, tórax, brazos y piernas, por lo que tuvo que ser asistido por los servicios sanitarios en su propia vivienda. Más tarde, fue trasladado en ambulancia al hospital Virgen de la Arrixaca de la ciudad de Murcia, donde aún permanece ingresado.

El matrimonio tiene dos hijos de 2 y 4 años que, según fuentes policiales, presenciaron el suceso. Una vez que el padre fue trasladado al hospital y la madre fue arrestada, una vecina se hizo cargo de los pequeños que, tras presenciar la escena, esperaron la llegada de algún familiar. Ayer, sábado, los niños habían vuelto a la casa donde ocurrieron los hechos acompañados de su abuela materna, que no quiso hacer ninguna declaración sobre el suceso, y sólo aseguró que los pequeños se encontraban bien.

La pareja reside en el número 18 de la calle Jardín de la pedanía murciana de Aljucer, aunque no es autóctona de la localidad. Según los vecinos, el matrimonio procede de Cádiz.

Los hechos ocurrieron sobre las 19.50 horas del pasado viernes. Efectivos de la Policía Local se personaron en el domicilio tras recibir una llamada anónima alertando de la situación. Por lo visto, el matrimonio había comenzado una discusión que concluyó con la presunta agresión de la joven. Aún se desconocen los motivos por los que la pareja tuvo esa disputa. Los propios miembros de la Policía Local tuvieron que llamar a los servicios sanitarios en vista de la gravedad de las quemaduras que presentaba el marido.

La detenida, cuyo nombre corresponde a las iniciales M.O.M., fue trasladada a las dependencias policiales de Murcia, donde se le abrieron las correspondientes diligencias bajo acusación de un supuesto delito de violencia de género. Según declaraciones policiales, se prevé que se celebre un juicio rápido a principios de la próxima semana para determinar la culpabilidad de la presunta agresora.

Además, fuentes del hospital Virgen de la Arrixaca aseguraron ayer que el agredido no quería hacer ningún tipo de declaración ni sobre su estado de salud ni sobre su versión de los hechos.