El artista muleño Nono García organiza, junto a la concejalía de Cultura, por sexto año consecutivo un Taller de Acuarela que finaliza durante la jornada de hoy. El taller, que ha contado con las instalaciones de la Biblioteca Municipal como sede oficial, ha mantenido clases teóricas y prácticas en las que los participantes han podido visitar algunos de los espacios más emblemáticos de la localidad para plasmar en sus lienzos bellos detalles del municipio. Uno de los objetivos del curso es, además de perfeccionar la pintura en acuarela, que los artistas utilicen el entorno que les rodea como modelo.

El taller cuenta con dos grupos: el primero de ellos que finaliza hoy y que daba comienzo el pasado día 17 y un segundo para el que todavía quedan plazas disponibles, del 8 al 10 de agosto. Este primer grupo ha contado con la participación de diez personas llegadas desde distintos puntos de la Península, entre ellos Sevilla, Toledo, Murcia, Valencia, Elche o Cartagena que se han desplazado hasta Mula para la realización de esta actividad.

El taller cuenta entre sus participantes con artistas que quieren perfeccionar la técnica de la acuarela, estudiantes de Bellas Artes o aficionados a la pintura, entre otros. «No hay que ser un especialista en pintura para poder participar en este tipo de actividades, pero el hecho de estar rodeado de artistas en todo momento y que cualquier rincón de Mula sea el taller donde se dibuja es un hecho importante para sentirte cómodo con este tipo de talleres. Que la gente se pare a ver lo que estamos haciendo y que se interesen es algo que te llena de satisfacción», afirmaba el artista muleño.

Nono García se mostraba muy satisfecho con el primer grupo ya que, además de pintar, es una buena manera de hacer nuevos amigos y poder disfrutar de las distintas visiones que los participantes tienen de tu pueblo. «En los ratos libres, además, aprovechamos para conocer los rincones más bonitos de Mula, como una subida al castillo o simplemente seguir hablando de pintura junto a una agradable mesa».

Durante la jornada de ayer, el grupo se encontraba en el patio del Convento de San Francisco. Los participantes en el taller aprovechaban que las instalaciones se encontraban cerradas al público para disfrutar de la serenidad que ofrecen las paredes de este emblemático edificio y plasmar algunos de los detalles que están siendo recuperados, como los pozos del patio del claustro o las siluetas de las pinturas que se dejaban caer sobre los lienzos al contacto de la tinta empapada.

Los interesados en el segundo grupo del TalleR pueden encontrar información en el Facebook del artista.